Más allá de que en París 2024 Zeballos iba a tener que jugar con un compañero diferente de con quien lo hace en el circuito y quitarle al equipo argentino un cupo de singlista dado que no se iba a desarmar el dúo estable de Machi González y Andrés Molteni, sus resultados recientes y la regularidad que viene mostrando en los últimos años lo ubicaban como la esperanza más grande de la Argentina de ganar una medalla. Ese es el criterio que se supone debería seguir el capitán a la hora de elegir, especialmente cuando tenía a disposición al número uno del mundo.
Zeballos y Granollers se sumaron al croata Mate Pavic y al salvadoreño Marcelo Arévalo, los primeros clasificados, y jugarán por quinto año consecutivo el prestigioso «Torneo de Maestros», un registro que sólo superan el estadounidense Rajeev Ram y el británico Joe Salisbury. En tres de esas cuatro participaciones, la dupla hispano-argentina superó el round robin y se clasificó para las semifinales. Y obtuvieron el año pasado su mejor resultado: fueron subcampeones tras perder la final, justamente, ante Ram y Salisbury.
En los Grand Slams la historia es similar. Todavía se les niega el título, pero consiguieron algunos resultados muy destacados, entre los que destaca una final en Flushing Meadows (2019) y dos en Wimbledon (2021 y 2023). Además, alcanzaron las semifinales del Abierto de Australia en 2022 y 2023 y también llegaron hasta esa instancia en las últimas tres ediciones de Roland Garros.
Ahora, tras vencer a Cerúndolo y Ugo Carabelli, chocarán en la segunda ronda del Major neoyorkino con la pareja conformada por el austríaco Alexander Erler y el neerlandés Matwe Middelkoop en busca de dar un paso más hacia esa coronación tan anhelada.
Zeballos, campeón esta temporada en Roma y Montreal, ganó ocho Masters 1000 -siete junto a Granollers- y suma 22 títulos entre todas las categorías de torneos que lo dejan en soledad como el doblista argentino más ganador de la historia. En definitiva, un peso pesado del circuito que sufrió quedarse afuera de los Juegos Olímpicos.
Dolido con Coria, el marplatense de 39 años rechazó la convocatoria del capitán para la fase inicial de las Finales de Copa Davis que el equipo argentino enfrentará ante Canadá, Finlandia y Gran Bretaña en el AO Arena de Manchester del 10 al 15 de septiembre. «Lamentablemente, mi relación con él no es buena. Cada uno piensa de forma diferente y tiene sus motivos que son completamente opuestos y eso hace que a mí me cueste respetar su palabra», comentó Cebolla, quien aseguró que le resulta incoherente que la dupla de Machi González y Andrés Molteni sea elegida como primera opción para los Juegos Olímpicos y no para la Copa Davis.
«Imaginate que, sumado a eso, hay una presión adicional que uno siente en la Copa Davis. Tener que convivir una semana bajo su tutela y no poder estar en esa misma sintonía, ya que pensamos completamente diferente, no le haría bien ni al equipo ni a mí», añadió el número uno.
Zeballos, «el mejor doblista argentino de la historia» como lo definió el propio Coria, sabe que esa herida será difícil de curar, ya pasó la página y se enfoca en el tramo final de su recorrido en el circuito. A los 39 años, atraviesa uno de sus mejores momentos y sueña con ese título de Grand Slam que corone su carrera.