Con el atractivo principal de la pelea por la corona entre el vigente campeón, el danés Jonas Vingegaard, y el gran favorito de la prueba, el esloveno Tadej Pogacar, este sábado comenzó a disputarse la 111ª edición del Tour de Francia, la competencia más importante de la temporada ciclística, que tendrá un recorrido de 3.492 kilómetros repartidos en 21 etapas y en cuatro países: Francia, Italia, el Principado de Mónaco y la Serenísima República de San Marino.
La prueba comenzará en Florencia y finalizará el 21 de julio en Niza. Esta será la 26ª edición en que la largada de la Grande Boucle se realizará fuera de Francia y la primera en toda la historia en que la llegada final no será en París.
Ello se debe a que la capital estará abocada en ese momento a los últimos preparativos para los Juegos Olímpicos, cuya ceremonia inaugural se realizará cinco días después. De las 21 etapas, ocho son con recorrido llano, cuatro con trazado accidentado, ocho de montaña, cuatro con llegada en alto y dos contrarrelojes individuales. Además habrá dos jornadas de reposo.
La primera etapa, que conectó Florencia con Rimini, toda en suelo italiano, quedó para un francés: Romain Bardet. El representante del equipo DSM, de 33 años, se escapó del pelotón a 50 kilómetros de la meta y terminó imponiéndose sobre su compañero, el debutante Frank van den Broek, dejando detrás de ellos, a apenas cinco segundos de distancia al grupo de favoritos.
En un final emocionante, líder y escolta trabajaron juntos para resistir los ataques y Van den Broek le brindó la victoria a Bardet, que obtuvo su cuarto triunfo de etapa en el Tour de Francia, carrera en la que llegó a terminar segundo en la general de 2016 y 2017. «Ya había renunciado al sueño del amarillo», dijo el nacido en Brioude, un poblado de 6.820 habitantes en una zona alpina cercana a Lyon. La alegría es doble: había avisado que el año próximo se retira y no correrá el Tour de 2025.
Entre la constelación de grandes corredores que dicen presente en esta prueba también se destacan el esloveno Primoz Roglic, los belgas Remco Evenepoel y Wout Van Aert, el neerlandés Mathieu Van der Poel, y los españoles Carlos Rodríguez, Enric Mas y Juan Ayuso. También está el británico Mark Cavendish, de 39 años, quien aspira a convertirse en el solitario máximo ganador de etapas del Tour: hasta el momento suma 34 y está empatado con el belga Eddy Merckx (las logró en las décadas de 1960 y 1970).
Si bien todos ellos encaran el Tour con grandes expectativas, el cartel de máximo favorito tiene un dueño: Tadej Pogacar. El corredor del equipo emiratí UAE Team Emirates es candidato a quedarse con su tercer título en el Tour después de los dos años de reinado de su gran rival, Jonas Vingegaard (representante del equipo Visma), el único que doblegó al esloveno en las últimas temporadas. Pero el nórdico está terminando de recuperarse de una lesión y su estado físico es una incógnita.
En condiciones normales, ambos corredores tendrían que disputarse el maillot amarillo, pero la carretera decidirá y habrá más rivales. El esloveno Primoz Roglic (del equipo Bora) y el debutante belga Remco Evenepoel (Soudal) tratarán de impedir que el Tour sea cosa de dos. También intentarán terciar los corredores más fuertes del Ineos-Grenadiers: el español Carlos Rodríguez, el colombiano Egan Bernal y el británico Geraint Thomas.
El recorrido será variado y con aspectos novedosos. Atravesará Italia, San Marino, Francia y Mónaco, y los corredores ascenderán los Apeninos y los Alpes italianos y franceses, el Macizo Central y los Pirineos. Además la prueba contará con dos contrarrelojes, de 25 y 34 kilómetros, y 32,2 kilómetros de caminos de tierra.
El pelotón se enfrentará a 3.492 kilómetros y un desnivel total de 52.230 metros, con siete etapas de montaña y cuatro finales en alto (Saint-Lary-Soulan, Plateau de Beille, Isola 2000 y Col de la Couillole). Habrá 27 grandes cimas: tres en los Apeninos, una en los Alpes italianos, doce en los Alpes franceses, tres en el Macizo Central y ocho en los Pirineos. Será un Tour menos montañoso que de costumbre, pero sin respiro.
Jonas Vingegaard procurará sumarse al selecto grupo de ciclistas que consiguieron al menos tres consagraciones consecutivas en el Tour: esa cantidad lograron el francés Louison Bobet (entre 1953 y 1955) y el británico Chris Froome (2015-2017), mientras que el francés Jacques Anquetil (1961-1964) y el belga Eddy Merckx (1969-1972) encadenaron cuatro y el español Miguel Induráin, cinco (1991-1995).
No será una tarea sencilla, sobre todo porque el danés de 27 años afrontará esta competencia con una inactividad de tres meses a cuestas (“fueron los meses más difíciles de mi carrera”, reconoció) tras el gravísimo accidente que sufrió en la Vuelta al País Vasco, que le provocó fracturas en una clavícula y varias costillas, y lo obligó a permanecer internado 12 días en el Hospital Universitario de Álava.
Para Tadej Pogacar, el reto será ganar el mismo año el Giro de Italia y el Tour de Francia, una gesta solo realizada por siete corredores en la historia y que nadie logra desde que el italiano Marco Pantani lo hizo en 1998. “Nunca me había sentido tan bien sobre una bicicleta como ahora”, avisó el esloveno de 25 años.
La bicicleta exclusiva de Pogacar
La presentación de los 176 competidores que participan de esta edición del Tour de Francia se realizó el jueves en Florencia, con un recorrido de aproximadamente tres kilómetros entre el Palazzo Vecchio y la Piazzale Michelangelo, donde se hallaba el escenario con la ciudad de fondo.
Siete de los ocho corredores del UAE Team Emirates (los españoles Juan Ayuso y Marc Soler, el portugués Joao Almeida, el francés Pavel Sivakov, el alemán Nils Politt, el belga Tim Wellens y el británico Adam Yates) hicieron el recorrido montados sobre las bicicletas Colnago C68 que usarán durante la competencia. Quien rompió el molde fue Tadej Pogacar.
El ganador del Tour en 2020 y 2021 utilizó una Colnago Fleur-de-Lys, una bicicleta de edición limitada (solo se fabricaron 111 unidades) que está valuada en 23.000 euros y que en la parte delantera del cuadro está cubierta con una hoja metálica azul especial con detalles de oro.
“El nombre y la librea de lirios dorados sobre campo azul son un homenaje al lirio, un elemento heráldico que simboliza la realeza y el orgullo”, detalló Colnago en su sitio web. Y añadió: “El lirio une a la ciudad de Florencia, cuyo escudo de armas es un lirio rojo sobre campo blanco, con la historia de la nación francesa, que desde sus inicios ha tenido en los lirios dorados sobre campo azul el emblema de su realeza”.
El cuadro es de carbono y consta de ocho partes. Del mismo material, súper liviano, es la horquilla preparada para frenos de disco con cables integrados, y la tija del sillín. En los cambios, las poleas, las roldanas y los frenos, la súper bicicleta está equipada con la última tecnología de Shimano, la marca reina de estos mecanismos. Usa neumáticos rodado 28, pero podría usar un rodado 30. Soporta un máximo de 120 kilos.