Tres accidentes consecutivos sufrió Williams en el Gran Premio de Brasil. Uno detrás del otro y sin tiempo de reacción para el equipo. «Es una cantidad que nadie puede soportar», dijo James Vowles, el director de la escudería británica. Hasta se llegaron a correr los rumores -totalmente falsos- de que no iban a poder recuperar los autos de Franco Colapinto y Alex Albon para el GP de Las Vegas, que arranca el próximo jueves. Sin embargo, toda la planta ubicada en Grove trabajó a destajo para conseguir el milagro: rearmar dos autos en pésimas condiciones en un período muy corto. Y cuando tenían todo en su contra (presupuesto y, especialmente, tiempo), los mecánicos pudieron conseguirlo.
La carrera en San Pablo acabó el domingo 3 de noviembre y el proceso de reconstrucción se inició recién el jueves 7, luego de que los autos (o lo que quedaba de ellos) llegaron a Gran Bretaña.
Los trabajadores hicieron primero una inspección para ver con qué se habían encontrado. Luego, procedieron a ver qué piezas tenían y cuáles debían diseñar desde cero para los nuevos autos. Por consiguiente, tomaron fotos, dividieron las funciones y se pusieron manos a la obra.
Sin descanso para no perder ni un minuto (permanecieron en la fábrica durante la madrugada) y necesitaron una semana para reparar los vehículos.
Para la próxima carrera de la F1, los fanáticos de argentinos deberán hacer un esfuerzo grande. Es que la fecha 22 del torneo se realizará en la madrugada argentina. El piloto de Pilar tendrá su segunda experiencia de noche y la tercera en un circuito callejero (las anteriores fueron en Singapur y Azerbaiyán). La actividad comenzará el jueves 21 de noviembre y se cerrará el domingo 24, con la carrera que se largará alrededor de las 3:00 (hora argentina).