Marcelo Gallardo ya está en River de nuevo. Después de su presentación oficial este lunes, firmó, acompañado del presidente de la institución Jorge Brito, el contrato con el club, que se extenderá hasta diciembre de 2025, dirigió su primera práctica por la tarde en el Monumental e inició su segundo ciclo como entrenador del club con su cuerpo técnico, el cual tiene varias caras conocidas y otras nuevas.
Entre los que ya estaban se encuentran Matías Biscay y Hernán Buján, como sus ayudantes principales, los preparadores físicos Pablo Dolce y Diego Gamalero, el videoanalista Nahuel Hidalgo, el asistente personal Mariano Barnao, quien se encargará de la logística y el jefe de prensa, Matías Ghirlanda, quien ya había vuelto a trabajar en el club a principios de este año. Como kinesiólogos volverán Jorge y Franco Bombicino.
Además, trabajarán con ellos otros especialistas que ya estuvieron en la primera etapa y son empleados del club: Sandra Rossi y Mariela Arangio estarán a cargo de la neurociencia, Pablo Nigro como psicólogo y Marcelo Pudelka, el nutricionista.
Y entre los nuevos se suman Nicolás Gómez como preparador físico (era de la Reserva) y Alejandro Albornoz, quien a igual que Hidalgo cumplirá funciones como videonalista, el médico Fernando Macías y Cristian Verdier y Javier Sodero como entrenador de arqueros, quizás la novedad más destacada. Fue compañero de Gallardo en River en los inicios del Muñeco como futbolista.
Sodero, cordobés de 60 años, atajó en River entre 1992 y 1995 y uno de los recuerdos que dejó en el paso por el club fue un penal atajado a Sergio “Manteca” Martínez en un Superclásico en la Bombonera que el Millonario ganó 2 a 0 con goles de Hernán Crespo y Ariel Ortega.
“El miércoles me dijo que había un espacio vacante como entrenador de arqueros, ‘¿querés acompañarme?’, me preguntó. Imaginate, ‘tengo los guantes puestos, ya estoy’, le dije», contó Sodero sobre cómo se dio su llegada al cuerpo técnico de Gallardo. Y agregó: «El viernes nos reunimos de nuevo con todo el cuerpo técnico. Ahí sí ya bajó directivas de trabajo Marcelo. El domingo estuvimos viendo el partido todos juntos, sufriendo un poco porque no pudimos ganar. Ahora estamos con más expectativas que antes», contó Sodero sobre cómo se dio su llegada al cuerpo técnico de Gallardo.
También expresó lo que siente en este momento: «Mi familia es de River así que imaginate cuando les dije que Marcelo me había llamado, la felicidad fue inmensa. Ellos estaban más contentos que yo. Espero estar a la altura de este cuerpo técnico que ha sido tan ganador».
A su vez, dejó definiciones sobre su labor: “Gallardo es un tipo muy exigente, se que River y él te demandan ’24 por 7′ y yo también soy así, por lo que no va a haber problemas”. Y añadió: “El puesto está muy bien cubierto y además los dos chicos que vienen (juveniles) son muy buenos también y tendrán el espejo de dos grandes arqueros”. Y con respecto a los penales, comentó: “Los penales se trabajan. Creo que son detalles, tenemos que lograr que ellos no estén ansiosos para esperar al pateador. Hay confianza”.
A diferencia de la etapa anterior, en el cuerpo técnico de Gallardo ya no están César Zinelli, (cumplía varias funciones, entre ellas como entrenador de arqueros, videonalista y ayudante del preparador físico), quien por motivos personales está en el exterior. Lo mismo para el profe Marcelo Tulbovitz, hoy trabajando en Uruguay y Pedro Hansing, que era médico del club pero se fue a principios de años de la institución.
La historia personal de Javier Sodero con Marcelo Gallardo
Javier Sodero tiene una historia con Gallardo que va más allá de los límites de la cancha y del trabajo. Hay un afecto personal.
Marcelo para mí es como un hijo, siempre le digo a Máximo que lo tuvo él pero yo lo adopté a los quince años cuando lo conocí», contó alguna vez.
Y Gallardo también fue importante hace poco cuando el ex arquero sufrió problemas de salud.
«Tuve una gran depresión y la pude pasar por el gran cariño de la gente en general y de mucha gente en particular entre ellos Marcelo Gallardo, Hernán Díaz y Enzo Francescoli. Estando internado, apareció Hernán Díaz con Gallardo. Eran como las diez de la noche y yo les dije: ‘¿Qué hacen acá, están locos?’, y esa visita fue muy linda. Estos gestos fueron los que me hicieron empezar a salir de esta gran depresión», reveló hace un tiempo.