El francés Teddy Riner, el judoca más laureado de la historia, tumbó este viernes al surcoreano Kim Minjong en la final de los +100 kilos y sumó en París su tercer oro olímpico individual en judo, hecho solo logrado por japonés Tadahiro Nomura, que se colgó el oro en 1996, 2000 y 2004 (-60 kilos).
En un combate que mezcló ambiente entre NBA y estadio de fútbol, Riner hizo lo impensable para muchos con 35 años en el contador. A falta de 16 segundos de irse la lucha al ‘golden score’, el llamado «Coloso de Guadalupe» espero el momento exacto para usar su cadera y echar al suelo al surcoreano con un ‘Harai-Goshi’. La llave perfecta.
Nada más estamparse la espalda de Minjong sobre el tatami ubicado en el Campo de Marte, la tribuna explotó como si Zidane hubiese marcado un gol a Brasil en el Mundial de 1998. También se exaltó el presidente francés, Emmanuel Macron, quien se fue a saludar a su campeón en mangas de camisa tras haberse quitado la chaqueta del traje.
Ya son cinco medallas individuales del ‘Caníbal’ del judo. Bronce en Pekín-2008, oro en Londres-2012, oro en Rio-2016 y bronce en Tokio 2020. A ellos se une el oro logrado por equipos mixtos en Tokio.
Riner, quien ya estaba en el olimpo de su deporte, ahora entra directo en la leyenda de los Juegos, a dos pasos de la Torre Eiffel.
Descalificación y polémica en la semifinal
Más temprano, en las semifinales, Teddy Riner se impuso ante el georgiano Guram Tushishvili, quien, tras recibir un ippon del francés, fue expulsado del combate por el árbitro español Raúl Camacho Pérez por empujar a su contendiente.
Segundos después de haber conseguido tumbar a su rival hasta que su espalda tocara el suelo, el francés celebró desde el suelo con el puño en el aire. Con la mente todavía en la pelea, Tushishvili interpretó ese gesto de celebración como una provocación, lo que desató una pelea de otro tipo entre los rivales.
Con el francés todavía en el piso, el georgiano lo acorraló con sus piernas y le aplastó la cara a modo de provocación. Mientras Riner intentaba incorporarse, Tushishvili lo empujó, una actitud que recibió abucheos por parte del público.
El georgiano ya tenía la mente en continuar con el combate, ya que se necesitan dos ippones para obtener la victoria, pero el árbitro decidió castigarlo por su mala conducta.
Camacho decretó la expulsión directa del georgiano bajo los enormes abucheos de los 8.000 espectadores del pabellón de Campo de Marte por la actitud antideportiva de Tushishvili. Ya no podrá seguir participando de los Juegos, ni siquiera en la prueba por equipos.
“Es una pelea muy tensa, un cuarto que podría haber sido una semifinal o una final. El georgiano es alguien que se enoja fácil, es un gran partido», comentó la ex judoca y medallista de plata, la francesa Frédérique Jossinet. «No es la primera vez que pasa algo así».
«En el judo, los valores, el respeto por el adversario y por quien vence, son muy importantes. Su reacción es lamentable y no entra dentro de los valores del judo«, subrayó.
Con esta particular victoria, Riner, de 35 años, buscará su tercer oro olímpico en sus quintos Juegos Olímpicos en las semifinales contra el tayiko Temur Rakhimov, al que venció las dos veces que se midió contra él, la última hace solo tres meses en la final del Gran Premio de Dushanbé.