Tiene 17 años, es el mejor jugador del fútbol argentino en la actualidad y todavía no terminó el colegio secundario. Ya no solo se habla de él en el país, sino también en el mundo. Es admirado y elogiado por los hinchas de River y también por rivales. Juega en la Sub-20 de Argentina y el cuerpo técnico de la Selección Mayor lo está mirando y en poco tiempo podría convocarlo.
Con tantas cosas en la mente, cualquier chico podría marearse y es lógico. Pero Franco Mastantuono, además de todo lo mencionado, también cuenta con una mente que supera a la media de su edad en el fútbol. Está formado, no solo futbolísticamente y cuenta con una madurez que exhibe en sus gestos y cuando le toca declarar al final de los partidos.
De cara el Superclásico del domingo, es la principal arma con la que cuenta River en la cancha para ganarle la batalla a Boca. Será el tercero en el que juegue, ya que en dos de los tres que se jugaron el año pasado le tocó entrar en el segundo tiempo (en el 1-1 en el Monumental y en el triunfo Millonario por 1 a 0 en la Bombonera), mientras que en la derrota 3-2 en Córdoba se quedó en el banco de suplentes.
“Es uno de los mejores jugadores del fútbol argentino. Es un proyecto que ya todo el mundo está hablando de él, tiene mucha habilidad, a los 17 años vas aprendiendo, vas mejorando y lo importante es que el equipo lo busca a él, casi todas las pelotas pasan por él, le pega bien los tiros libres, tiene una gran pegada”, expresó, consultado por Clarín, Norberto Osvaldo Alonso, gloria e ídolo de River y voz más que autorizada para hablar de la nueva joyita Millonaria, al que muchos riverplatenses le ven cosas del Beto, justamente.
“Es un chico que ve humilde y eso es importante, no solo en el fútbol, sino en la vida. Y sé que sigue estudiando, eso está muy bien y habla de que el pibe tiene la cabeza bien enfocada. Ojalá pueda estar tres o cuatro años más en el club para que el hincha lo pueda disfrutar, pero es difícil porque hoy se van rápido y los entiendo”, agregó el Beto Alonso.
Lo que e Beto” refleja del estudio de Mastantuono es así. El pibe está cursando –de modo virtual- el último año del secundario en el Instituto River después de haber estudiado en el Colegio Inmaculada Concepción de Azul. Y piensa perfeccionar su inglés.
También se formó en el Club de Remo de su ciudad (el mismo del que salió Federico Delbonis pero como tenista). La raqueta la dejó a los 13 años cuando eligió definitivamente el fútbol, a pesar de que era muy bueno en el tenis ya que llegó a ser el jugador Sub-12 número 1 del país. Cuentan allí que golpeaba “fuertísimo” y a los pibes más grandes “los cagaba a palos” en el juego. Pero se decidió por la pelota número 5. Y mal no le fue…
“Es la joyita, no solo de River, sino también del fútbol argentino. Tiene unas condiciones tremendas y va a seguir mejorando porque a los 17 años lógicamente no hacés todo a la perfección. Pero tiene un físico privilegiado, carácter y humildad y eso lo va a ayudar a progresar. Marca diferencias, juega y hace jugar, da pases-gol y hace goles. Y a corto plazo va a jugar en la Selección. Y también se va a ir a Europa, lo vamos a disfrutar poco lamentablemente”, manifestó Daniel Onega, otra gloria de River, en diálogo con este diario.
Hijo de Cristian y Sofía y hermano de Lucila y Valentín, Mastantuono no solo es un adelantado en el fútbol. También lo fue fuera de la cancha. A los 8 años tuvo su propio canal de YouTube en el que subió algunos videos de juegos de PlayStation o suyos jugando a la pelota.
“Es un distinto, es un pibe que gambetea, va para adelante, que la pierde y la vuelve a agarrar, que se saca uno o dos jugadores de encima pero no hay que olvidarse que tiene 17 años y que tiene muchas cosas por aprender. Los más grandes nos tenemos que hacer cargo cuando las cosas se plantean difíciles y que él solo disfrute”, elogió y advirtió Enzo Pérez hace poco.
Y Ariel Ortega, otro símbolo de River, expresó: “Me encanta de Mastantuono que siempre busque encarar, que gambetee, que pida la pelota y que cuando se equivoque, la vuelva a pedir. Es joven, no hay que cargarlo de presión”.
Por ahora, el pibe de Azul parece no sentir esa carga. Y eso que los ojos de clubes poderosos del mundo ya lo pusieron en él. De hecho, el diario The Sun, de Inglaterra, informó recientemente que Manchester United lo quiere y estaría dispuesto a pagar los 45 millones de la cláusula de rescisión del zurdo cuando cumpla los 18 años en agosto. También Real Madrid está agazapado esperando la oportunidad.
En River, de todos modos, lo quieren un tiempo más en el club. Tiene contrato hasta diciembre de 2026 y buscarán extendérselo y elevarle la cláusula, por más que sepan internamente que será difícil mantenerlo. Pasó con Claudio Echeverri, la otra joya de estos tiempos, que se fue rápidamente al Manchester City. Y Mastantuono ya hizo más que el Diablito con la banda roja en el campo de juego. Pero eso se verá más adelante. Ahora, en Núñez quieren seguir disfrutando del talento de Mastan.