El delantero colombiano ex Boca, Sebastián Villa, vuelve al fútbol argentino. Un año y un día después de que un tribunal de Lomas de Zamora lo condenara a 2 años y un mes de prisión por violencia de género, Independiente Rivadavia de Mendoza, su nuevo destino, lo anunció como flamante refuerzo. En el medio, una huida al exterior, conflictos y varias polémicas.
El club cuyano, presidido por Daniel Vila, no se preocupó por los antecedentes privados y judiciales del futbolista de 28 años que supo ser el mejor del ámbito local, y apostó por su vértigo y su gambeta para mantenerse en Primera División. No sólo eso, ya lo bautizaron como «caudillo», tal como lo definieron en el posteo en redes con que anunciaron la noticia.
En Independiente Rivadavia mostraron un video con los primeros movimientos de Villa en el club y sus primeras palabras como futbolista de la institución, durante una práctica. «Humildad, esfuerzo y corazón», comentaron.
«Estoy muy contento de estar aquí. La expectativa que tengo es que podamos permanecer en Primera Divisón y hacer un buen torneo. Mis fuertes son la velocidad y el mano a mano, el juego en equipo y con goles. Vengo con muchas ganas de aportar mi mejor versión, de hacer las cosas bien y de no ahorrarme ni una gota de sudor», dice Villa en el video.
Sin embargo, si de publicaciones digitales se trata, la que hizo más ruido la firmó un colega, el defensor Nahuel Gallardo, hijo de Marcelo, que también recaló en la llamada «lepra mendocina» tras un paso por Sarmiento de Junín. «Lindo encontrarnos, buena gente», le dedicó en una historia de Instagram tras una de las primeras prácticas juntos, en una foto donde también aparece el marcador ex Colón y Atlético Tucumán, Bruno Bianchi.
Tras aquella tarde de junio de 2023 en la que escuchó su veredicto, Sebastián Villa fue apartado de Boca. El club esperó el fallo de la Justicia para tomar una decisión con el colombiano, que en ese entonces también enfrentaba una acusación de violación, que luego quedó en la nada.
Al verse obligado a entrenar en soledad, privado de poder volver a jugar en forma profesional, la reacción del futbolista con paso por la selección de su país fue considerarse con el pase en su poder y buscarse otro club, en un conflicto que terminó escalando hasta llegar a la FIFA.
Villa primero entrenó en España y luego terminó jugando en el Beroe Stara Zagora, un club de la Primera División de Bulgaria (11 partidos y 5 goles), antes de este regreso a Independiente Rivadavia de Mendoza, donde entrena desde esta semana.
«Él tiene una condena de dos años y un mes, que la termina de cumplir el año que viene y mientras tanto está en libertad condicional. Cualquier persona tiene derecho a una segunda oportunidad si cometió un error, estamos hablando de una persona con condena firme», dijo Vila sobre Villa, planteando la postura del club respecto a la decisión de su vinculación.
El último partido de Villa en el fútbol argentino fue el 1ro de junio de 2023, el día previo a su paso por el Juzgado Correccional N°2 de Lomas de Zamora donde se conoció su condena: el colombiano posó junto al primer equipo de Boca con una pancarta que tenía la leyenda «Ni una menos».
El ex Deportes Tolima llegó al club xeneize en 2018, donde jugó un total de 172 partidos oficiales, marcó 29 goles, cedió 33 asistencias y levantó 7 títulos: dos Supercopas, dos Ligas, dos Copas de la Liga y una Copa Argentina.