qué necesitan Boca, River, Racing, San Lorenzo y el resto de los argentinos para clasificar y cómo es el desempate

Se terminó otra semana de copas en Sudamérica y los equipos argentinos hacen balances, cuentan y suman a la espera de la definición de sus grupos, con el sueño de la clasificación a los octavos de final. Tanto en la Libertadores como en la Sudamericana hay ganadores y perdedores, y algunos grupos quedaron apretadísimos por lo que los goles, las actuaciones como visitante y otro factor extra serán claves en caso de desempate.

A la fase de grupos de ambas competiciones les quedan dos partidos, y el reglamento es sencillo. En la Libertadores los dos primeros pasan a los octavos de final mientras que el tercero tiene el consuelo de seguir corriendo en la Sudamericana; y en la Sudamericana pasa a octavos el primero de cada grupo, mientras que el segundo debe jugar un playoff ida y vuelta por sorteo con los terceros que llegan de la Libertadores. Clarísimo.

La cuarta fecha de la Copa Libertadores determinó al primer equipo argentino clasificado a octavos de final, y no fue River. Se trata de Talleres de Córdoba, que ganó como local ante Barcelona de Guayaquil y pasó de fase con notable autoridad y en forma anticipada, en un Grupo B que tenía a San Pablo y los ecuatorianos como rivales de riesgo.

El que se quedó con ganas de alcanzar ese premio fue el equipo de Martín Demichelis, que ganaba 2-0 y terminó trayéndose un empate con sabor amargo de su visita a Nacional de Montevideo. Sin embargo, el traspié no es sinónimo de lamento para los de Núñez porque están virtualmente adentro. Tienen 10 puntos en el Grupo H y a falta de dos partidos debería ocurrir una catástrofe deportiva para no clasificar.

River todavía debe recibir a Libertad de Paraguay y al Táchira de Venezuela en el Monumental, y le alcanza con un puntito. Incluso podría pasar de fase perdiendo ambos encuentros porque sus rivales, Nacional y los guaraníes, juegan entre ellos y se sacan puntos. En conclusión, sólo una carambola matemática prácticamente imposible permitiría que el Millonario termine tercero.

Las cuentas son más complicadas para San Lorenzo, el equipo argentino que juega en uno de los grupos más peleados del certamen. Con Palmeiras cortado como líder con 10 unidades, la batalla por el segundo lugar promete ser apasionante hasta el último minuto. El Ciclón quedó con 4 puntos al igual que Independiente del Valle y Liverpool de Uruguay.

Bajo la conducción de Leandro Romagnoli, los de Boedo le ganaron a los ecuatorianos en el Bajo Flores, cosechando su primera victoria y acomodándose como escoltas. En este «triangular» por la clasificación lo que se le viene a San Lorenzo invita a seguir adelante con la ilusión.

El próximo jueves debe recibir a Liverpool, en una especie de final en la que sería ideal sumar de a tres, ya sabiendo qué pasó con Independiente del Valle, que visita el miércoles al Palmeiras. Luego, en la última fecha, visitará a los brasileños, que ya podrían estar clasificados y jugar ese partido sin tantas obligaciones. ¿Y qué pasa en caso de empate de puntos?

El reglamento de la Libertadores establece varios criterios de desempate en caso de que dos, tres o cuatro equipos sumen la misma cantidad de puntos en la fase de grupos: diferencia de goles, cantidad de goles a favor, cantidad de goles a favor como visitante y, por último, posición en el ranking de la Conmebol, un coeficiente donde se computan actuaciones históricas y actuales en el certamen y en la Sudamericana.

En el caso que en el grupo de San Lorenzo se tenga que apelar a ese ranking, elaborado en diciembre de 2023 y publicado en la web de la Conmebol, los de Boedo están «mal pero no tan mal», como dice la muletilla que usa un conductor de TV fanático del club azulgrana. Ubicados en la posición 32 aparecen detrás de Palmeiras (1ro) e Independiente del Valle (16to) pero delante de Liverpool (103ro).

Estudiantes de La Plata dio un paso atrás. El flamante campeón argentino cayó en Bolivia ante The Strongest, líder con 7 puntos, y complicó sus chances en el Grupo C, otro que promete pelea hasta la última pelota. Suma 4 unidades, uno más que Gremio, que marcha último pero debe un partido contra Huachipato (con 5) suspendido por las inundaciones que azotaron a Porto Alegre.

El Pincha debe visitar al tricolor brasileño, partido que también deberá ser reprogramado, y en la última reciben a Huachipato, con la esperanza de que todavía dependa de sí mismo para alcanzar la zona de clasificación.

Algo parecido le pasa a Rosario Central, que le tocó caer en el Grupo G donde Atlético Mineiro parece imparable. Los dirigidos por Miguel Ángel Russo perdieron contra el equipo de Gabriel Milito y ahora hacen cuentas. Tienen 4 puntos, dos menos que Peñarol, y tres más que Caracas, su rival de la próxima fecha.

El Canalla debe ganarle a los venezolanos y esperar que el Mineiro le saque puntos a Peñarol en Montevideo, para jugarse la vida en la última fecha visitando a los uruguayos. Ese último partido tendrá como condimento extra además los graves disturbios que se vivieron en el partido disputado en Rosario.

Con Boca y Racing como candidatos desde el arranque, la Sudamericana hoy tiene a un argentino que se da el lujo de mirar a todos desde arriba: Lanús. El equipo del Ruso Zielinski suma 10 puntos y es el de mejor cosecha en estas primeras cuatro fechas del torneo.

La lucha en los grupos de la Sudamericana es clasificar en el primer puesto o, en el peor de los casos, salir segundos y acceder a un playoff contra los terceros de la Libertadores. En esa lucha el más holgado es el Grana, que tiene 10 puntos y le quedan dos partidos como local, primero ante el humilde Metropolitanos de Venezuela (sin unidades) y luego ante Cuiabá de Brasil, hoy escolta con 8.

Racing perdió contra Bragantino y ahora comparte liderazgo con los brasileños, por lo que será fundamental sumar todo lo posible en lo que resta y ampliar su diferencia de gol, que hoy lo tiene cinco goles arriba del club auspiciado por Red Bull. En Avellaneda son optimistas porque deben ser locales contra Coquimbo y Sportivo Luqueño, a los que ya les ganó como visitante.

Para Boca la historia se dio vuelta esta semana: ganó en Paraguay y ahora depende de sí mismo para superar a Fortaleza, en la lucha por la primera posición del Grupo D. El club de La Ribera deberá ganarle a los del argentino Juan Pablo Vojvoda en la Bombonera (juegan el próximo miércoles a las 21 horas) y luego confirmar esa posición en la última fecha, recibiendo al débil Nacional Potosí.

Belgrano de Córdoba, otro que aspira a octavos, se complicó al empatar como local frente a Delfín de Ecuador. Si bien figura como líder, con 6 puntos, Inter de Porto Alegre tiene 5 pero un partido menos, también en vilo por el desastre climático que se desató sobre la ciudad gaucha. Al Pirata cordobés le resta recibir a Real Tomayapo y cierra en la última visitando a los brasileños.

Otro que corre de atrás es Argentinos Juniors, tercer en el grupo que tiene a Racing de Montevideo líder y a Corinthians de Brasil como escolta. El Bicho además debe ir a buscar un buen resultado en su visita al conjunto brasileño y cierra con Nacional de Paraguay, el último en la tabla.

De todos los argentinos, el de peor presente fronteras afuera es Defensa y Justicia. El equipo de Vaccari, en la previa uno de los candidatos a dar pelea, no tuvo un buen arranque y está pagando caro un mal sorteo. Tiene solamente 4 puntos y mira de lejos a Independiente Medellín, con 9, y a Always Ready, que se hace fuerte en la altura boliviana y suma 10.

Al Halcón le restan dos partidos como local, primero ante los colombianos y luego frente a Universidad Club Vallejo, el humilde club peruano que perdió sus cuatro partidos.