A solo unas horas de la revancha ante Cruzeiro que podría catapultarlo a la final de la Copa Sudamericana, Lanús pudo celebrar anticipadamente, ya que la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) le otorgó el reconocimiento de título oficial a la Copa Juan Domingo Perón, que el club obtuvo hace poco menos de siete décadas, el 24 de abril de 1955. Así, el Granate sumó su séptima estrella.
La ceremonia de reconocimiento se realizó el lunes en el estadio Ciudad de Lanús Néstor Díaz Pérez y en ella participaron todos los integrantes de la Comisión Directiva del club, encabezados por el presidente Luis María Chebel, y el primer mandatario de la AFA, Claudio Tapia. Este reconocimiento fue el colofón de un proceso que se había iniciado con una investigación del Departamento de Patrimonio Histórico y Museo de Lanús y había continuado con una solicitud de la dirigencia de la institución a la casa madre del fútbol vernáculo.
El título, que ahora reviste carácter oficial, fue el que el conjunto del sur del Conurbano bonaerense obtuvo en el certamen organizado conjuntamente por la AFA y el Gobierno de la provincia de Buenos Aires entre marzo y abril de 1955, mientras el seleccionado nacional disputaba el Campeonato Sudamericano en Chile y antes de que comenzara el torneo de primera división de esa temporada, que ganaría River.
La AFA, en su Boletín N° 2.060, autorizó la disputa del Torneo de la Provincia de Buenos Aires – Copa Juan Domingo Perón, del que participarían siete equipos, todos ellos afincados en territorio bonaerense: Racing, Lanús, Banfield, Chacarita, Tigre, Estudiantes de Eva Perón (nombre que entonces tenía la ciudad de La Plata) y Gimnasia de Eva Perón. Independiente se excusó de intervenir porque tenía compromisos amistosos internacionales y además había tenido que ceder a varios futbolistas al seleccionado argentino.
El certamen comenzó el 12 de marzo de 1955 y se disputó con un sistema de doble eliminación: los conjuntos que perdían en las rondas iniciales podían seguir compitiendo en una fase de reválida. Por ser impar la cantidad de participantes, se realizó un sorteo para determinar qué equipo avanzaría directamente a las semifinales de la ronda de ganadores: Tigre fue el afortunado.
El primer día de competencia, Chacarita venció 2 a 1 a Gimnasia en San Martín y Estudiantes empató 2 a 2 con Banfield, pero se vio beneficiado por una particular forma de desempate que se empleaba en aquellos tiempos: avanzó a las semifinales por haber tenido más córneres durante el tiempo suplementario de 15 minutos.
Un día después debutó Lanús, que entonces contaba con un equipazo, conocido como los Globetrotters. Ese elenco, que tenía como principales figuras a Juan Héctor Guidi, Juan Nazionale y Nicolás Daponte, sería subcampeón del certamen de primera división de 1956 (detrás de River), pero antes se daría el gusto de ganar la Copa Juan Domingo Perón.
En su primera presentación en el torneo, Lanús igualó 0 a 0 con Racing en la cancha del conjunto de Avellaneda y, al igual que Estudiantes, se clasificó a las semifinales gracias a un córner conseguido en el tiempo suplementario: fue luego de un remate de Oscar Contreras que Rogelio Domínguez cacheteó junto a uno de los postes del arco que defendía.
El 20 de marzo, en una de las semifinales de la ronda de ganadores, el Granate venció 2 a 1 a Estudiantes, en su estadio y ante 10.000 espectadores, con dos goles de Benito Cejas (Manuel Pelegrina, de penal, descontó para el Pincha). Y en la final de esa ronda, el 1 de abril, el elenco dirigido por Juan Bautista Cevasco batió 2 a 1 a Tigre en el estadio de San Lorenzo gracias a un doblete de Rodolfo García (descontó Eugenio Aguilar).
Tras esa victoria, Lanús debió esperar 23 días hasta que se completó la fase de reválida, de la que Estudiantes emergió como vencedor. Por ello, el encuentro decisivo de la Copa Juan Domingo Perón fue una reedición del choque que estos dos equipos habían protagonizado en las semifinales de la ronda de ganadores.
En ese duelo, en la cancha de Racing y ante 5.000 espectadores, Lanús triunfó 2 a 1. Raúl García, de cabeza tras un córner de Ramón Moyano, puso en ventaja al ganador. El Pincha igualó con un remate de Juan Eulogio Urriolabeitía que se desvió en la cabeza de Juan Nazionale. Y Osvaldo Gil, tras una buena maniobra individual de Emilio Fernández, marcó el tanto decisivo a tres minutos del final. “Pese a la persistente lluvia -que no dejó de caer en todo el match- y al fangoso estado del field, fue interesante y sumamente disputada la brega”, contó el cronista de Clarín que estuvo ese día en el estadio.
Con esa victoria, Lanús se hizo acreedor a un trofeo donado por el gobernador de la provincia, Carlos Aloé; a otro otorgado por la AFA (que está exhibido en el Museo Granate) y a 11 medallas de oro para los futbolistas del equipo ganador. Casi 70 años después, ese título logró reconocimiento oficial y así se sumó a los otros seis que logró el club: la Copa Conmebol 1996, el Torneo Apertura 2007, la Copa Sudamericana 2013, el Campeonato de Primera División 2016, la Copa Bicentenario 2016 y la Supercopa Argentina 2016.