River vuelve a Mendoza, la que es considerada como su segunda casa. No solo porque se dice que es la provincia del Interior en la que más riverplatenses hay, sino también porque en el Malvinas Argentinas, el equipo de Núñez supo tener una racha muy positiva durante el ciclo de Marcelo Gallardo. Sin embargo, quedó un mal recuerdo de las últimas veces que pisó la tierra del sol y el buen vino.
Ya con Martín Demichelis al mando, hace dos meses, River jugó un amistoso contra Independiente Rivadavia en el que fue goleado por 4 a 0. Y, oficialmente, la última presentación fue en la caída ante Talleres por la Copa Argentina del año pasado.
En aquella oportunidad, River también jugó por la instancia de los 16avos del certamen nacional, como lo hará ahora también ante Temperley. Y aquel partido con el conjunto cordobés, en el que cayó 1-0 y fue eliminado, lo jugó cuatro días después de ser campeón en la Liga Profesional.
Entonces, contra el Celeste, hay otro desafío para River, además de seguir avanzando en la Copa Argentina: el de recuperar el aura en el Malvinas Argentinas de Mendoza. Porque en ese estadio, el equipo de Núñez pasó de ganar los 13 partidos oficiales que disputó ahí durante el ciclo del Muñeco a quedar eliminado el año pasado con Demichelis y a caer duramente en un amistoso.
Originada en 2014, la mística de River en Mendoza tuvo el punto más alto el 14 de marzo del 2018, cuando River le ganó 2-0 la Supercopa Argentina a Boca, con un marco espectacular que brindaron las dos hinchadas más populares de país. El Pity Martínez -de penal- y Nacho Scocco marcaron los goles que les dieron el título a los dirigidos por el Muñeco, luego de un arranque de año bastante irregular («Jugar mal durante este tiempo fue parte de la estrategia», diría Gallardo luego del encuentro, una frase que quedó para el recuerdo).
Hubo otros grandes momentos en el Malvinas. Por ejemplo, el primer encuentro del ciclo de Gallardo en ese estadio, una goleada 4-0 de alto vuelo futbolístico a Godoy Cruz. Y ahí también nació el primer título del ciclo del Muñeco, la Copa Sudamericana 2014. En el debut en el certamen, por la segunda fase, le ganó 1-0 a Godoy Cruz en ese estadio con gol de Germán Pezzella de cabeza. Ahí, además, ganó las ediciones de la Copa Argentina de 2017 (2-1 a Atlético Tucumán) y 2019 (3-0 a Central Córdoba). Es decir que, en total, obtuvo tres títulos allí: dos Copa Argentina y una Supercopa.
En este caso, hablar del Malvinas Argentinas no es lo mismo que hablar de Mendoza en general. Porque el penúltimo partido de River en esa provincia fue una derrota 2-1 ante Godoy Cruz en 2021 pero en el Feliciano Gambarte, que en realidad es la cancha del Tomba (habían vuelto ahí por un partido de Los Pumas: desde fines del 2022 sigue en remodelaciones, se estima que estará listo en agosto o septiembre).
Ahora, el objetivo de River es volver a ese récord positivo para lograr el pase a octavos en la Copa Argentina, una de las prioridades del semestre para Demichelis: «Tenemos la responsabilidad de hacerlo mejor que el año pasado. Dolió muchísimo quedar eliminados días después de haber logrado el campeonato el año pasado. Contra Temperley, River tiene la obligación de pasar. Pondremos en la cancha lo mejor que tenemos disponible», afirmó el entrenador el sábado luego de la goleada 3-0 a Belgrano.