Carrera tras carrera, Franco Colapinto no deja de demostrar que tiene casi todo lo que se necesita para ser un piloto de Fórmula 1. Lo único que le falta es una butaca. Y eso es algo que está fuera de su alcance. No hay talento ni carisma, algo que tiene innato, que le permita por el momento seguir corriendo en la máxima categoría en 2025. Y el argentino, siempre con los pies en la tierra, se hace cargo de la situación.
«No tengo ningún asiento para el año que viene y, de momento, no estaré corriendo en Fórmula 1. Probablemente estaré corriendo en otro lado», advirtió Colapinto después de llegar 12° en el Gran Premio de México en diálogo con el canal de streaming oficial de la Fórmula 1.
Y siguió: «Así que va a ser tal vez un año en el que no voy a estar acá, pero espero estar demostrando que merezco un asiento acá lo suficiente como para volver en el 26 o en el 27. Es mi objetivo y por eso hago lo que puedo carrera tras carrera».
Las palabras de Colapinto surgieron luego de un fin de semana cargado de rumores sobre supuestas conversaciones que mantuvo el austríaco Helmut Marko, asesor de Red Bull, con James Vowles, jefe de Williams, en torno a una posible negociación por la cesión del piloto argentino.
Sin embargo, Colapinto negó toda posibilidad de que pueda sumarse a Racing Bulls, la segunda formación de la poderosa escudería que pertenece al conglomerado de bebidas energéticas. Pero, sobre todas las cosas, trata de no ilusionarse en vano. «De momento no entiendo mucho de lo que están hablando. No sé de dónde salió», comentó el oriundo de Pilar, que en cinco carreras, desde que heredó el auto del estadounidense Logan Sargeant, sumó cinco puntos para el Mundial de Pilotos.
Y Colapinto no solo está demostrando que puede terminar entre los 10 primeros, sino que también tiene buen manejo de neumáticos, propone buenas estrategias y que, a la hora de la verdad, sabe defenderse y hasta sobrepasar en maniobras en las que queda mano a mano con pilotos experimentados como Fernando Alonso. Además, sobre todo en las carreras, es capaz de sacarle más jugo al Williams que Alex Albon, el piloto principal de la escudería británica.
Si bien el esfuerzo del argentino es más que valioso, la Fórmula 1 es más complicada que un buen rendimiento. Tal como lo explicó Marko al medio austríaco Kleine Zeitung: «El problema con él es que tiene un contrato a largo plazo con Williams. No es interesante para ningún equipo. No quieres entrenar a un piloto para otro equipo».
Por su parte, Vowles está dispuesto a ayudar al argentino a conseguir un lugar en la parrilla el año que viene. «Creo que en todas estas cosas en este momento, vamos a empezar por lo básico. Se ha ganado su puesto en la parrilla, y lo que queremos es ayudarlo a encontrar un sitio en ese sentido», aseguró. «Lo que parece, no te lo puedo decir en este momento, porque A, es muy delicado, y B, realmente no hay mucho que discutir en este momento».