En la previa del duelo de Peñarol y Botafogo por la semifinal de la Copa Libertadores en Río de Janeiro, decenas de fanáticos del conjunto uruguayo protagonizaron este miércoles hechos violentos en una playa de la ciudad carioca, informaron fuentes oficiales.

Los incidentes ocurrieron en horas del mediodía en la playa Recreio dos Bandeirantes, en el oeste de esta ciudad brasileña, donde hubo saqueos a comercios, destrucción de quioscos, fue incendiado un micro y varios agentes de la policía fueron atacados.

Cerca de 200 personas fueron detenidas durante los altercados, informó Cláudio Castro, gobernador de Río de Janeiro.

«Río no es un lugar para problemas. Ordené a la policía arrestar, llevar a la comisaría y escoltar fuera de Río de Janeiro a los hinchas de Peñarol que están causando gran confusión en la Zona Oeste», señaló el funcionario a través de un mensaje publicado en su cuenta de la red social X.

«El fútbol es un deporte de celebración y unidad. No permitiremos que estos criminales trastornen la vida cotidiana de la población con actos de salvajismo y vandalismo. Escenas como estas no se pueden repetir», agregó Castro.

Llamativamente, entre los demorados se encontraba Guillermo Varela, futbolista uruguayo que juega para el Flamengo y que inició su carrera precisamente en el Manya, que busca su sexto título continental.

El club brasileño se manifestó vía X por la presencia del defensor en videos que circulan en las redes sociales y reportó que el lateral «recibió una llamada de dos amigos y fue a sacarlos del caos de la Praia do Recreio».

El hecho ahora será investigado por el vicepresidente de fútbol del Mengao, ​​Marcos Braz.

La Policía Militarizada dijo, por su parte, que los incidentes comenzaron luego de que uno de los hinchas fuera sorprendido robando un celular en el interior de un comercio en la playa.

Videos compartidos por las redes sociales muestran los momentos en que los fanáticos del equipo uruguayo, algunos con sus rostros cubiertos, destrozan sillas y mobiliario de los quioscos y atacan con palos y botellas a algunos que disfrutaban de un día de playa.

Ante la imposibilidad de contener a los violentos, la policía llamó al Batallón de Choque para reforzar la seguridad, que logró frenar los actos violentos y someter a los vándalos.

Botafogo y Peñarol se enfrenarán este miércoles en el estadio Nilton Santos de Río de Janeiro en el partido de ida por semifinales de la Libertadores.

El vencedor de esa serie se medirá en la final con el mejor del pulo entre River y Atlético Mineiro.



Fuente Clarin

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