No fue para nada fácil, pero la novela tuvo final feliz. Rayados de Monterrey liberó a Maximiliano Meza y es el octavo refuerzo de River en este mercado de pases. Con el transfer, el club de Núñez, que ya lo había anotado provisionalmente el viernes para la Copa Libertadores, pudo confirmar la inscripción ante la Conmebol este lunes casi sobre la hora del plazo máximo, que era a las 15.
De esta manera, Meza, quien llegará entre martes y miércoles al país, se sumará al plantel que conduce Marcelo Gallardo luego del duelo de River ante Talleres por la ida de los octavos de final en Córdoba y lo tendrá listo para la vuelta en el Monumental, ya que el ex Independiente viene en actividad.
Si por algo se recordará este pase, que se termina haciendo por 2 millones de dólares a modo de resarcimiento (el contrato de Meza en México vencía en diciembre), es por la gran cantidad de vaivenes que tuvo. Y que se potenciaron por la crisis futbolística que vive Rayados: tras despedir al DT Fernando Ortiz por la temprana eliminación en la Leagues Cup, los propietarios del club prefirieron evitar el hecho de asumir el costo político de la salida del volante en un contexto que de repente se volvió más que hostil para ellos.
Por eso no fue hasta que cerraron a Martín Demichelis (sí, los caminos de Micho y River se siguieron cruzando por estas horas) que cedieron y terminaron enviando toda la documentación a Buenos Aires.
Demichelis, que aceptó el desafío y se convertirá en el técnico de Rayados, habló con Meza y el futbolista le manifestó que su deseo era irse de México y jugar en River. El ex DT del Millonario lo entendió e inmediatamente le solicitó a los dirigentes del club mexicano que lo liberaran.