Los Pumas no pudieron ponerle la frutilla a un 2024 que será inolvidable, incluso, pese a la derrota ante Francia en el último partido del año. La indisciplina volvió a configurarse como un aspecto a resolver: el equipo de Felipe Contepomi recibió dos amarillas en la primera parte y la desventaja numérica hizo más fuerte a los de Fabien Galthié que completaron la ventana de noviembre en alza. Fue un cómodo 37-23 para Les Bleus, que hicieron la renta en esa mitad inicial y luego se dedicaron a controlar los embates de los argentinos.
Al seleccionado nacional le faltó orden y le sobró ímpetu. Incluso en momentos se pasó de revoluciones. No fue un equipo equilibrado. Porque volvió a tropezar con sus desinteligencias, pero también fue superior en varios lines y tuvo momentos de dominino que se esfumaron en la mayoría de los rucks y los contactos. Buenas y malas ante un rival al que nunca terminó de incomodar.
La tríada de partidos de la gira europea culminó acaso la versión más deslucida de Los Pumas, ya que el comienzo había sido con la goleada ante Italia y un partidazo ante Irlanda, aunque también con derrota. En el Stade de France, el arbitraje del inglés Luke Pearce tampoco contribuyó a que Argentina ensayara una recuperación más sólida: fue implacable con las amonestaciones y no fue a revisar algunas que podría a ver observado con mayor detalle. Con elegancia, ya terminado el test match, Contepomi dio cuenta de ese aspecto aunque no lo señaló como excusa de la caída.
Más allá de esas incidencias, Los Pumas no lograron reflejarse en sus recientes y buenas actuaciones. Las de esta ventana y las del último Rugby Championship que lo tuvieron como protagonistas hasta la última fecha, mano a mano con el campeón del mundo, Sudáfrica. No pudieron ante Francia y no es el resultado lo que impidió cerrar el año con una mejor imagen, aunque de los 12 partidos disputados, hayan sido seis victorias y la misma cantidad de derrotas. Ese equilibrio objetivo no deja lugar para balances negativos.
A Los Pumas el partido se les hizo cuesta arriba. Comenzaron con todo y en los primeros instantes no dejaron soltarse a Francia. Pero antes de que se cumplieran los cuatro minutos, sucedió la primera de las situaciones que el equipo de Contepomi pagó caro. Jean-Baptiste Gros salió lesionado y en la revisión del TMO el inglés Pearce encontró al capitán argentino, Julián Montoya, responsable de la lesión, por una palanca en la pierna del francés. Afuera 10 minutos.
La diferencia numérica jugó en favor del local que en ese lapso consiguió la diferencia en el marcador que siempre estuvo en su favor. Abrió la cuenta Thibaud Flament con un try con conversión de Thomas Ramos. El apertura estuvo implacable con los pies desde cualquier ángulo y distancia.
En Los Pumas Tomás Albornoz fue la llave para el descuento en la primera parte, instancia en la que al equipo logró plasmar su plan de juego. Aprovechó los penales a los palos y de esa manera achicó en nueve puntos la distancia que había logrado Francia, con otros dos penales de Ramos y la conversión para el segundo try, el de Gabin Villiere.
Si algo podía empeorar en la Argentina fue la segunda amarilla a cinco de que se completaran los primeros 40 minutos. Juan Martín González se la jugó en la última línea y cacheteó la pelota para evitar que Louis Bielle-Biarrey apoyara. El árbitro confirmó en la pantalla su impresión -que el argentino no intentó jugar- y consideró que la acción del tercera línea fue un knock on intencional. Otra vez con 14 jugadores y try-penal para Francia, que tuvo tiempo para otro tiro a los palos del implacable Ramos.
La segunda parte comenzó con Los Pumas diezmados hasta que se cumplieran los 10 afuera de González. Fue el segundo tiempo el que mostró una mejor cara del equipo argentino, aunque no le alcanzó para dar vuelta la historia. El try llegó con una jugada preparada: Franco Molina bajó el lanzamiento desde la línea de Ignacio Ruiz y descargó en Pedro Rubiolo para el que el pack empujara en los últimos metros al ingoal y Thomas Gallo apoyara.
Pero lo que se insinuaba como recuperación, encontró una rápida reacción de Francia. Bielle-Biarrey jugó la personal, tiró un sombrero ante una defensa a contrapierna y a pura potencia se lanzó de palomita en el ingoal. Más tarde, con un efectivo pick and go, Coco Ruiz consiguió el segundo try que esperanzaba con una recuperación de Los Pumas que nunca llegó. Un dato alentador: el resultado del segundo parcial fue favorable para los de Contepomi.
El gran año de Los Pumas terminó con una derrota que empañó la última postal en París. Sin embargo en el album de fotos de 2024 las imágenes de la goleada a Australia en Santa Fe, la de la victoria en Santiago del Estero ante Sudáfrica y sobre los All Blacks en Wellington, son fotogramas que componen la mejor imagen del primer año de Contepomi al frente del seleccionado.