Después de semanas de conjeturas, especulaciones, negociaciones, presiones, acuerdos y suculentos movimientos entre cuentas bancarias, las principales ligas de Europa completaron su período de transferencias fuertes para la temporada 2024/25. Si bien todavía puede haber movimientos de último momento en Italia (el plazo de inscripción cerrará el sábado a la medianoche) y en Alemania (podrán registrarse operaciones hasta el lunes), los dirigentes y entrenadores terminaron de dar forma a sus planteles para esta campaña. Entre los centenares de traspasos que se sellaron, algunos resaltaron especialmente. El que más, sin dudas, fue el de Kylian Mbappé.
El pase del francés de París Saint-Germain a Real Madrid venía fraguándose desde hacía años. El folletín terminó de escribirse en junio, cuando el vínculo entre el PSG y el futbolista se extinguió y entonces el delantero, en condición de jugador libre, pudo firmar con el Merengue un contrato hasta 2029 que en estas cinco temporadas le permitirá embolsar, según afirman en los mentideros españoles, 175 millones de euros solo en concepto de salario y prima.
El Madrid, que cuenta con el plantel más valioso del planeta (valuado en 1.340 millones de euros por el sitio especializado Transfermarkt), no se conformó con la contratación de Mbappé: también sumó al brasileño Endrick, cuya compra le demandó una inversión de 72 millones de euros. El traspaso estaba acordado con Palmeiras desde hacía un año y medio, pero recién pudo efectivizarse el 21 de julio, cuando el delantero alcanzó la mayoría de edad.
El otro grande de Madrid, el Atlético, también invirtió fuerte para sumar goles al equipo que conduce Diego Simeone: desembolsó 75 millones de euros (y se comprometió a pagar otros 20 millones en concepto de variables) para sumar a Julián Álvarez, quien, luego de dos temporadas en Manchester City, se mudó a España y firmó un contrato hasta 2030 con el club que también cuenta con Rodrigo De Paul, Ángel Correa, Nahuel Molina y Juan Musso (fue cedido por Atalanta por 12 meses).
El otro equipo que aspira a destronar a Real Madrid en la Liga es Barcelona, que reforzó su ataque con Dani Olmo, hombre fundamental en la consagración del seleccionado español en la Eurocopa que se disputó en Alemania. El atacante de 26 años regresó al club en el que se formó y del que había partido una década atrás para jugar cinco años y medio en el Dinamo de Zagreb y cuatro años y medio en el Leipzig alemán, al que el Barça le pagó 55 millones de euros (más 7 millones por bonos).
A diferencia de lo ocurrido en mercados anteriores, los traspasos más estruendosos no ocurrieron en Inglaterra. Sin embargo, los poderosos de la Premier League también se movieron intensamente. El vigente tetracampeón, Manchester City, recuperó a uno de los jugadores fundamentales durante el ciclo de Josep Guardiola: İlkay Gündoğan. Después de un año poco satisfactorio en Barcelona, el alemán, en condición de libre, se vinculó por una temporada con los Ciudadanos.
El otro conjunto de la ciudad, Manchester United, invirtió 215 millones de euros para reforzar la dotación que ya integraban Lisandro Martínez y Alejandro Garnacho. Entre sus incorporaciones, se destaca una que consiguió sobre el cierre del plazo de inscripciones: la del uruguayo Manuel Ugarte, uno de los pilares del seleccionado de Marcelo Bielsa, por quien pagó 50 millones de euros a París Saint-Germain. Los Diablos Rojos también sumaron, entro otros, al zaguero neerlandés Matthijs de Ligt, de Bayern Múnich.
El Liverpool de Alexis Mac Allister mantuvo casi intacto su plantel de la pasada campaña. Solo incorporó a un hombre, pero fue un jugador de elite: el extremo del seleccionado italiano Federico Chiesa, por quien le pagó módicos 12 millones de euros a Juventus y a quien proyecta como reemplazante del egipcio Mohamed Salah, cuyo contrato expirará en junio de 2025. Muchísimo más (77 millones de euros) debió entregar Tottenham a Bournemouth para quedarse con la ficha del delantero Dominic Solanke, autor de 19 goles en la pasada edición de la Premier League.
En Italia, Juventus rompió el chanchito con el objetivo de recuperar la hegemonía en la Serie A. Así, se quedó con futbolistas que tuvieron un gran rendimiento en la pasada temporada como el neerlandés Teun Koopmeiners (Atalanta) y el brasileño Douglas Luiz (Aston Villa). Entre esas incorporaciones se destaca la de Nicolás González. Tres excelentes campañas en Fiorentina le valieron al jugador del seleccionado argentino este salto, que requirió un pago de 33 millones de euros (más 5 millones en bonificaciones).
La Roma de Leandro Paredes y Paulo Dybala se quedó, a cambio de 38 millones de euros, con la ficha del ucraniano Artem Dovbyk, el goleador de la pasada edición de la Liga española: marcó 24 tantos en 36 partidos. No conforme con ello, la Loba invirtió 25,6 millones de euros para sumar al marplatense Matías Soulé, quien protagonizó una gran temporada a préstamo en Frosinone (su pase pertenecía a Juventus).
Si bien los clubes europeos configuraron sus planteles para esta temporada en estas febriles semanas, tendrán una nueva chance de hacer retoques durante el invierno boreal: el periodo de transferencias comenzará el 1 de enero (en España será el 2) y finalizará el 3 de febrero (en Italia será el 4).