la selección de España despide con dolor a su hincha más famoso

El fútbol español está despidiendo este jueves 1° de mayo a uno de sus personajes más recordados y más queribles: murió a los 76 años Manolo, el del bombo, histórico hincha que acompañó a la selección de su país a diez mundiales, siempre con el instrumento, una boina y muchísima alegría. «Seguirás haciendo retumbar nuestros corazones», recordó la Roja.

Manuel Cáceres Artesero dijo adiós después de pasar por serios problemas respiratorios, reportan medios locales. Manolo, como le decían, nació en San Carlos del Valle, en Ciudad Real, y fue animador de muchos clubes como el Huesca, donde se crio, pero también del Real Zaragoza y especialmente del Valencia, club del que era hincha.

Pero alcanzó la fama con su boina, su camiseta de la selección y su mítico bombo, que en ocasiones adornaba con distintos mensajes.

Su primer viaje para animar a la selección española fue en 1979 a un partido que España jugó contra Chipre. A partir de ahí comenzó a asistir a cada encuentro y su popularidad se disparó durante el Mundial de España en 1982, cuando se desplazaba «a dedo» para ir a los partidos de La Roja. Tal fue su irrupción que durante la Copa del Rey de 1983 fue recibido por el Rey Juan Carlos I, que le hizo entrega de una placa agradeciéndole su labor para con el deporte.

Desde entonces, Manolo estuvo acompañando y animando a la selección en diez Mundiales: además de España ’82, estuvo en México ’86, Italia ’90, Estados Unidos ’94, Francia ’98, Corea y Japón 2002, Alemania 2006, Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018. También estuvo en ocho Eurocopas y en incontables amistosos y partidos de otros certámenes.

Su racha de mundiales se cortó en 2022, cuando no pudo estar en Qatar. Venía de atravesar serios problemas económicos y aunque era su intención viajar para alentar a la selección, no pudo hacerlo luego de que la Real Federación Española de Fútbol le proporcionara entradas para los partidos y los vuelos pero no alojamiento, algo indispensable para entrar al país.

Su último partido junto a la selección fue el del pasado 23 de marzo en Valencia, contra Países Bajos, por la Liga de las Naciones. Allí recibió un precioso homenaje por parte de los hinchas.

«Ha fallecido uno de nuestros seguidores más fieles, quien siempre nos acompañó en las buenas y en las malas. Sabemos que seguirás haciendo retumbar nuestros corazones. Descansa en paz, Manolo. Nuestro más sentido pésame a sus familiares y amigos», publicó el perfil de la selección de España en la red social X.

Y atrás de ellos se sumaron varios equipos españoles, entre ellos el Valencia, al que supo animar durante muchos años. En el último tiempo, Manolo vivía en la localidad de Moncofar, en la provincia de Castellón.

Durante mucho tiempo regenteó un bar llamado Tu Museo Deportivo en las inmediaciones de Mestalla, el estadio del Valencia, que tuvo que cerrar durante la pandemia. En el bar, un museo al fútbol, disfrutó de grandes momentos y lo pasó muy mal cuando tuvo que traspasarlo.

Gracias a una campaña impulsada por un amigo en Internet, pudo salir adelante con la ayuda de aficionados anónimos que le donaron pequeñas cantidades. Sin embargo, esa ayuda no llegó nunca del mundo del fútbol profesional. “De los jugadores, no. Tampoco quiero nada… pero nunca nadie me ha dicho: ‘Toma, Manolo’”, confesó, sin rencor, en una entrevista.

Por entonces, a sus 71 años sabía que ya se iba jubilar, su bar estaba cerrado y pensaba en subastar alguno de sus bombos porque, con apenas poco más de 400 euros que le ingresaban por mes, necesitaba dinero para comer. La crisis, universal en tiempos de pandemia​, le llegó inexorablemente.

“Me he gastado todo mi dinero en el fútbol y por el fútbol, pero estoy muy orgulloso de todo”, recordó Manolo, quien por encima de todos sus viajes recordó su odisea para ver levantar a Iker Casillas el título de 2010.

Según fuentes de la Federación, su hija quiere que el mito de la afición española sea enterrado en Huesca.

La presencia de Manolo con su bombo rememora también la trayectoria de un personaje similar que tuvo la Selección argentina con el icónico Tula, también fallecido en los últimos años.

“En México 86 todos los españoles lo pasamos muy bien, pero lo de Sudáfrica fue superior, porque me puse enfermo, volví a España y luego regresé para las semifinales y la final. También lo pasé muy bien en Venezuela. Me llamaron para que animara a la selección española Sub,16 en la que estaban Iván de la Peña e Iván Pérez, el hermano de Alfonso”, comentó en una entrevista en 2020.

También rememoró por entonces con nostalgia su estancia en diez campeonatos del Mundo y los 15.000 kilómetros que hizo a puro dedo en el Mundial de España de 1982 para ver los mejores partidos.

“De Alicante a Valencia fui en una ambulancia con un muerto”, lamentó Manolo, cuya peor pesadilla fue la final de la Recopa de 1980 en la que el Valencia ganó al Arsenal en la tanda de penales y que estuvo marcada por las agresiones de seguidores ingleses a valencianistas en Bruselas y señaló que el Huesca, el Zaragoza y el Valencia son los tres equipos que lleva en el corazón.