Fernando Gago sorprendió al dejar a Edinson Cavani en el banco de suplentes para el partido frente a Unión de Santa Fe, por la fecha 23 de la Liga Profesional de Fútbol. Al final, la movida le salió bien. Milton Giménez, su reemplazante, convirtió el único gol de la victoria frente al Tatengue y sigue sumando en la tabla de goleadores. Llegó a nueve tantos (cinco en Boca y cuatro en Banfield) y quedó a tres de los 12 de Brian Romero, el máximo artillero del campeonato.
Esa decisión fue vista con buenos ojos por una parte importante de los fanáticos boquenses que coparon la Bombonera. Es que, más allá de la jerarquía que el uruguayo trae de su larga trayectoria por el fútbol europeo, su rendimiento en los últimos partidos estuvo lejos de conformar. «Tienen que jugar los que mejor están y punto», repetían los hinchas en la previa. Y las declaraciones del entrenador tras el encuentro confirmaron esa visión.
«Lo dije desde un primer momento: voy a confiar en todos los futbolistas. Me pareció que era el mejor partido para poner a este equipo. Esa es la realidad. No hay ningún problema, no hay nada. A Edi le tocó entrar a los 18 minutos del segundo tiempo y manejó las situaciones del partido. Me gusta trabajar de esta manera y que todos los futbolistas sientan que tienen posibilidades de jugar», declaró en la conferencia de prensa.
Sin embargo, horas más tarde se conoció que no fue ese el verdadero motivo del cambio. Lo que sucedió fue que Cavani llegó tarde a la charla táctica previa al encuentro que se realizó en el hotel y Gago se mostró inflexible. Según trascendió, cayó bien en el plantel que el DT cumpliera con su palabra sin importar los pergaminos del delantero, con pasado en Napoli, París Saint Germain y Manchester United, entre otros clubes top de Europa, y quien también rompió redes con la camiseta del seleccionado uruguayo. Iba a ser titular y capitán del equipo, pero estaba haciendo trabajos de recuperación con los médicos, se demoró y fue sancionado.
Si a un jugador de la jerarquía de Cavani no se le perdona una falla de este tipo, menos aún va a haber contemplaciones con el resto de los jugadores. En realidad, las mismas reglas corren para todos. Ese es el manual de conducta que aplica el DT. El mismo castigo le cayó al colombiano Frank Fabra y Juan Ramírez, quienes iban a estar a disposición para sumar minutos en el complemento. Finalmente, los dos fueron al banco de suplentes, pero miraron todo el partido desde allí.
Gago, se conoce, es un técnico con personalidad y eso fue a buscar Juan Román Riquelme cuando lo sacó de las Chivas de México. En Racing ya había tomado un par de determinaciones de peso bajo la excusa de hacer cumplir las reglas internas. Encima, Boca ganó, sumó su tercer triunfo al hilo y se acerca a la Copa Libertadores 2025 por la tabla anual, si es que falla en la Copa Argentina. Noche redonda la del miércoles.