River la ganó 3-1 al Urawa Red Diamonds en su debut en el Mundial de Clubes, pero hubo un par de notas laterales que dieron que hablar en el post partido. Además del partido de Mastantuono, que empieza a despedirse del Millonario, y la lesión de Driussi que se perderá lo que resta del Mundial de Clubes, hubo una actitud que llamó la atención: en la entrada de los equipos, el capitán de los japoneses, el noruego Marius Hoibraten, pasó por delante de los futbolistas argentinos sin mirarlos ni saludarlos.
Para este Mundial de Clubes, la FIFA planteó una entrada bien estadounidense, al estilo NBA, modificando el habitual protocolo para los encuentros internacionales. ¿Cuál? Los futbolistas ingresan uno por uno mientras la voz del estadio los menciona, luego deben formarse en sentido vertical y no horizontal como ocurría anteriormente.
Disputados varios partidos de la competencia, la lógica indicaba que los jugadores se iban aprendiendo la nueva modalidad. Sin embargo, ayer hubo una situación que llamó la atención.
El capitán del conjunto de Japón, Marius Hoibraten, caminó con su banderín en mano por delante de la fila india de futbolistas de River sin estrecharle la mano a ninguno de sus rivales. Los campeones del mundo Germán Pezzella y Gonzalo Montiel, los dos últimos de la fila del ‘Millonario’, se sorprendieron y lo siguieron con la mirada, sin entender por qué actuaba así.
Como ocurre en estos tiempos, los fanáticos se encendieron rápidamente en las redes y las críticas no tardaron en llegar. Sin embargo, la situación era desconcertante ya que no existían antecedentes entre ambos equipos.
Høibråten, capitán de Urawa Red Diamonds, pasó por delante de los jugadores de River Plate sin darles la mano 😳@FIFACWC | Todos los partidos gratis en | #FIFACWC #TakeItToTheWorld pic.twitter.com/zIrHnGgen8
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El noruego quedó en evidencia porque, detrás suyo, el arquero Shusaku Nishikawa sí saludó a los jugadores de River, al igual que el resto de los integrantes del equipo dirigido por el polaco Maciej Skorża.
Ya en el partido, Hoibraten pareció sufrió el karma de su acción. En el primer tiempo le anularon con justicia el empate parcial: metió una palomita bárbara pero había partido claramente en posición adelantada en un tiro libre desde la izquierda.
¡SUSTO EN EL FONDO DE RIVER!
Høibråten marcó el empate para Urawa Red Diamonds, pero fue anulado inmediatamente por fuera de juego.#MundialDeClubesEnDSPORTS #FIFACWC pic.twitter.com/W0tTxVelCZ
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Después, en el arranque del segundo tiempo, llegó lo peor cuando se confió en una pelota elevada en el borde del área y la peinó hacia atrás pensando que su arquero iba a estar más cerca, pero el pase le quedó a mitad de camino y aprovechó Sebastián Driussi para convertir el 2-0 parcial de River.
Los hinchas del equipo argentino lo celebraron con sabor a revancha. Sin embargo, esta mañana el noruego de 30 años explicó lo sucedido.
«A la hinchada de River Plate», encabeza el posteo de Hoibraten en redes.
«Olvidé hacer el apretón de manos porque la configuración era nueva. Estaba confundido y en mi zona, y no entendía que se suponía que debíamos hacerlo. Por eso caminé sin hacer el apretón de manos. Parece que no me importas ni tú ni los jugadores. Esta nunca fue mi intención. Me disculpé con los jugadores en el vestuario después del partido y ahora me disculpo con vosotros. ¡Enhorabuena por la victoria! Todo lo mejor en los próximos juegos», explicó en sus redes sociales.
Hoibraten llegó en 2023 desde el Bodo/Glimt y rápidamente se volvió en referente, con más de 100 partidos disputados, tres goles y una asistencia, siendo marcador central. El encuentro ante River significó su cuarto a nivel de Mundial de Clubes, ya que había jugado tres en 2023, contra León de México (1-0, segunda ronda), Manchester City (0-3, semifinal) y Al Ahly (2-4, por el tercer puesto). A ese torneo y al actual en Estados Unidos se clasificó por haber sido campeón de la Champions de Asia.