Iker Muniain todavía sueña con jugar en River. El mediocampista español volvió a expresar lo que siente por el club. ¿Podrá ese amor ser correspondido? ¿ Lo querrán de la misma manera en Núñez o lo rebotarán?
“River es un equipo que siempre le he seguido, desde que era pequeño, desde hace muchísimos años. Quitando el Athletic que es el equipo de mi vida, hacia River siento algo especial, un vínculo emocional y sentimental grande. Lo he dicho muchas veces”, afirmó Munian en una entrevista a Marca.
El futbolista español de 31 años acaba de dejar Athletic de Bilbao, el único club de su carrera hasta el momento. Por lo tanto, tiene el pase en su poder. Y el deseo de jugar en River surgió de él mismo. No solo por el sentimiento hacia el club, sino también porque quiere probar otras experiencias: salir del fútbol europeo y probarse en otras ligas.
“Considero que la Argentina es una Liga muy competitiva, con pasión por el fútbol y con una cultura futbolística que tienen los argentinos, las hinchadas, la pasión que tienen en cada estadio es espectacular. También está la Copa Libertadores de por medio, que es una Copa muy, muy deseada por todos”, reforzó Muniain al respecto.
Esa pasión de Munian es tan grande que lo llevó el 9 de diciembre de 2018 a Madrid para presenciar la final de la Copa Libertadores de modo incógnito, en el Santiago Bernabéu.
De todos modos, su deseo no es fácil de cumplir. Es que, por diferentes motivos, hoy en River no avanzaron con una posible contratación del español. En primer lugar, según pudo saber Clarín, porque el jugador debería resignar mucho dinero de un posible contrato, para que en Núñez puedan pagarlo y que su salario no sea desproporcionado al del resto del plantel.
Por otro lado, desde el club afirman que por el momento hay una gran cantidad de mediocampistas en el plantel que conduce Martín Demichelis y no es prioridad reforzar esa zona del campo de juego.
Por último, solo queda un cupo de extranjeros y sería para el delantero paraguayo Adam Bareiro, un futbolista que en River consideran que necesitan con urgencia, dado que solo cuentan con Miguel Borja como atacante de área.
La solución podría llegar con la ciudadanía argentina de Paulo Díaz, que ya inició las gestiones hace meses, pero el trámite recién saldría para agosto o septiembre.
Con Paulo Díaz, Sebastián Boselli, Agustín Sant’Anna, Nicolás Fonseca y Borja en el plantel y a la espera de sumar al paraguayo Bareiro como refuerzo, entonces la chance de contar con el ícono del Athletic de Bilbao queda por ahora apenas en el plano de los deseos.
Esto, independientemente de si con Nacho Fernández, Esequiel Barco, Manuel Lanzini u otros futbolistas de similares características a las de Muniain no se hubiesen superpuesto en una nómina en la que existen volantes de todo tipo, edad y función.
A los 31 años, y toda una vida en Bilbao que incluyó 579 partidos y tres títulos, Iker decidió marcharse del club en el que fue una referencia histórica para comenzar una nueva etapa.
Su intención era iniciarla en River para cumplir su sueño de hacer un gol en un Monumental repleto por 86 mil almas. Pero, por ahora, no encontró correspondencia. Entonces, tendrá que valorar las propuestas que le llegaron desde clubes brasileños, mexicanos, estadounidenses y árabes para elegir su próximo destino. Aunque él mantendrá latente hasta último momento su sentimiento de ponerse la banda roja.