La gran maniobra de Franco Colapinto para superar a Liam Lawson en el tramo final del Gran Premio de México de la Fórmula 1, quedó opacada luego de la tajante decisión de los comisarios deportivos, quienes decidieron sancionar al piloto argentino por el roce que protagonizó con el piloto neozelandés en el desenlace de la misma.
El impacto, que en principio pareció un simple toque de carrera, generó daños en el alerón delantero del hombre de RB, que tuvo que ingresar a boxes a reemplazarlo. Una vez finalizada la prueba, y ya al tanto de que los comisarios habían decidido aplicarle a Franco una penalización de 10 segundos y dos puntos en su Superlicencia, Lawson se refirió al tema y, muy sincero, reconoció de quién fue la culpa del toque.
«Honestamente, le di espacio en la curva dos y él también venía a mucha velocidad, más de la que esperaba. Intenté salir de ahí, pero sólo le agarré la rueda trasera», comenzó sin vueltas el piloto de 22 años, quien reemplazó a Daniel Ricciardo en el equipo satélite de Red Bull.
Además, aclaró: «Así que en realidad no es su culpa ni nada por el estilo. Simplemente fue un incidente torpe«.
Lawson y un día para el olvido en la Fórmula 1
Previo al toque con Colapinto, el neozelandés ya había protagonizado un fuerte episodio con Checo Pérez, piloto de Red Bull, y quien encima era local.
El neozelandés trató de superar al mexicano en la curva 4 del Autódromo Hermanos Rodríguez y el neumático delantero izquierdo de su monoplaza impactó en el lateral derecho de Checo. El toque dañó seriamente el pontón y el suelo del Red Bull.
«Simplemente, vino derecho como si no hubiera ningún coche. Creo que podría haber evitado el incidente. Por suerte lo vi y abrí la puerta, de lo contrario habría sido un choque masivo. No era necesario. Dañamos las dos carreras. Fue demasiado», acusó el mexicano. «No le van a poner ninguna sanción. Le pasó lo mismo a Fernando (en Austin) y le pasó lo mismo a Franco. No hay sanciones, quizá a Red Bull le guste que sea agresivo», completó.
Encima, en las últimas horas, en redes sociales los fanáticos del mexicano acusaron al neozelandés de hacerle un polémico gesto en plena carrera. Y luego del encontronazo con Checo y tras el toque con Franco, Lawson fue llamado a la oficina de Christian Horner, director deportivo de Red Bull, seguramente para algún llamado de atención por lo sucedido.
La sanción a Franco Colapinto
Una de las imágenes que quedarán para el recuerdo del GP de México de la Fórmula 1 es la pelea en la pista que Franco Colapinto tuvo con Liam Lawson, el otro novato de la parrilla, que reemplazó a Daniel Ricciardo en RB, el equipo B de Red Bull. El argentino, faltando cinco giros, pudo pasar al neozelandés para terminar 12°. Pero…
Durante la maniobra, y cuando el auto azul de Franco ya casi había superado al blanco y azul de Lawson, hubo un pequeño toque que involucró a la parte trasera del Williams del bonaerense de 21 años y la delantera del neozelandés de 22. Tras el toque, Lawson fue que debió cambiar el alerón, mientras que Colapinto pudo concluir la carrera sin inconvenientes.
Sin embargo, y tras el análisis, se determinó penalizar a Colapinto con un recargo de 10 segundos. Pero Franco mantuvo la posición conseguida en pista porque le había sacado una ventaja de 12 segundos al 13º, Esteban Ocon.
Pero eso no fue todo, además del recargo, la FIA decidió aplicarle, también, sus primeros dos puntos en la superlicencia. De llegar a los 12, la sanción sería no correr un Gran Premio.
Qué dijeron los Comisarios Deportivos sobre el toque de Colapinto con Lawson
«Colapinto intentaba adelantar por el exterior a Lawson en la curva 1. No estaba completamente a su lado en el vértice y en la salida, por lo que no tenía ‘derecho’ a espacio de carrera en la salida. Lawson se defendió agresivamente hasta la salida de la curva 1, pero se mantuvo en la pista y dejó el espacio justo para que Colapinto permaneciera en pista desde la salida de la curva 1 hasta la curva 2, aunque finalmente Colapinto se salió de la pista», dice el comunicado.
«Ambos coches estaban en una línea comprometida al acercarse a la curva 2, Colapinto más. Lawson dejó espacio a Colapinto en el vértice de la curva 2. Colapinto mantuvo la potencia, lo que lo obligó a abrirse a la salida de la curva 2 y lo hizo colisionar con el alerón delantero de Lawson».
«Aunque los comisarios consideran que la mayor parte de esta secuencia fue una lucha limpia, el hecho de que Colapinto forzara la situación cuando no era capaz de completar el adelantamiento en ninguna de las curvas significa que fue el principal culpable de la colisión».