Luego de 14 meses y cinco días, este lunes desde las 16.30 de España, Dani Alves volvió a respirar aire libre. Ya no está tras las rejas. El exfutbolista logró pagar la fianza de un millón de euros que le otorga la libertad provisional, al menos hasta que quede firme el proceso judicial encabezado por la Audiencia de Barcelona que lo condena a cuatro años y medio de prisión, tras ser denunciado por abusar de una joven en una discoteca, en diciembre de 2022.
Ya gozando de sus primeras horas de libertad, tras abandonar la prisión de Brians 2 de Barcelona, el ex lateral brasileño intenta retomar el estilo de vida que mantenía previo a verse encarcelado.
Así es como, acompañado de su abogada Inés Guardiola y mirando continuamente al frente a pesar que lo rodeaba una manifestación en protesta de su libertad, Alves se subió a un auto que aguardaba por su salida. El dueño del vehículo es su amigo Bruno Brasil, colega que estuvo presente en la noche del presunto abuso.
En los pocos pasos que dio hasta el coche, el jugador de 40 años evitó contestar cualquier pregunta que los periodistas presentes en el penal le realizaban. Lo primero que hizo el brasileño fue dirigirse a su mansión valuada en cinco millones de euros.
La televisión española entera transmitió la salida de Alves del penal y se sorprendió por la sorpresa que lo esperaba cuando llegó a la puerta de su casa: «“Lo más… No sé si fuerte, indignante… Lo más llamativo es que a escasos minutos de llegar Alves a su domicilio pasaba lo que verán a continuación. ¿Qué le han traído a Alves? Nada más y nada menos que un ramo de flores. Ha recibido un ramo de flores. No ha salido él, obviamente, a recoger ese ramo. Ha salido alguien del servicio», reclamó la presentadora española Beatriz Archidona».
La salida de la cárcel de Dani Alves y el nido vacío
Según cuentan desde España, Alves no tomó ninguna decisión en libertad sin antes despedirse de los reclusos que lo acompañaron durante el último año. Les regaló toda la ropa que su familia le brindó en cada visita, como también un televisor y un ventilador. Es por ello que cuando las cámaras captaron al brasileño abandonar la prisión no cargaba ningún bolso con pertenencias personales.
Gran parte de la indumentaria que obsequió sería de estilo deportiva, la cual vestía para cada uno de los partidos que jugaban entre los prisioneros diariamente. Además, también habría dejado una biblia para practicar la lectura religiosa.
La salida de Dani Alves de la prisión de Brians 2 resultó bastante tensa: escuchó gritos de «no soy tuya» de algunos manifestantes, mientras se dirigía a un auto blanco que lo esperaba desde la calle, y con oficiales que lo seguían a distancia cercana.
Además, en el lugar también había protestas del personal penitenciario porque en otra cárcel de Cataluña, una cocinera fue asesinada por un preso, que luego se suicidó.
Pocas horas pasaron para que el brasilero recibiera su primer golpe de realidad y se topara con el primer gran cambio en su nueva vida: su ex esposa Joana Sanz no se encuentra residiendo en el domicilio. Según el programa emitido desde Miami, El Gordo y Flaca, la mujer habría abandonado la residencia la noche anterior al regreso del brasileño. «Sabemos que Joana no quiere volver con su esposo y esto lo está llevando muy mal Alves«, comentó un fotógrafo del ciclo televisivo.
Igualmente, el exídolo del Barcelona (tras la condena, fue retirado del museo de glorias) no estará solo: sus padres y hermanos se encuentran en viaje rumbo a Barcelona para comenzar acompañarlo físicamente en este nuevo proceso. Además, este miércoles es el cumpleaños de su papá, por lo que buscarán celebrar la fecha todos juntos.
En lo que fue la primera noche, ya con algunos familiares haciendo compañía, se vio a un delivery acercarse a la mansión para hacer entrega de una hamburguesa. Posiblemente se trató de un pedido para saciar uno de los tantos antojos de Alves durante los últimos 14 meses.