Menos de cuatro asaltos necesitó Naoya Inoue para ratificar su supremacía indiscutida en la categoría gallo. El japonés noqueó este viernes al surcoreano Ye Joon Kim en un combate que se desarrolló en el Ariake Arena de Tokio y de esa forma defendió por tercera vez las cuatro fajas de esa división, consiguió su 10ª definición categórica consecutiva y extendió a 29 su racha de victorias en fila.
Muy claro era el favoritismo de uno de los mejores peleadores libra por libra de estos días en este pleito ante un rival que había sido convocado con apenas 13 días de anticipación debido a que un profundo corte bajo la ceja izquierda había sacado de carrera al australiano Sam Goodman, número uno en los rankings de la de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) y la Organización Mundial de Boxeo (OMB), quien iba a ser el adversario del monarca en esta contienda. E Inoue hizo valer ese favoritismo casi sin afectar su prolijo peinado.
Después de un primer asalto de estudio, el nipón de 31 años comenzó a apurar el paso en el segundo capítulo y sus contundentes golpes pusieron en alerta a Kim, quien había llegado a esta presentación con una marca de 21 triunfos (13 por la vía rápida), dos derrotas y dos empates, y estaba afrontando su primera pelea mundialista. Conforme acumulaba impactos, el pómulo izquierdo del aspirante se iba inflamando y operaba como señal elocuente de cuan oscuro se iba tornando el panorama.
Más allá del pundonor que Kim exhibía sobre el cuadrilátero, la definición parecía solo cuestión de tiempo. Y se produjo cuando restaba menos de un minuto para que concluyera el cuarto episodio: un bombazo de derecha de Inoue explotó en el rostro del retador y lo puso de rodillas en la lona. El árbitro Mark Nelson ni siquiera necesitó completar la cuenta para sacar de pelea al valeroso surcoreano y sentenciar el triunfo del campeón.
De esta manera, el púgil nacido en Zama y radicado en Yokohama consumó su 24ª victoria en peleas en las cuales hubo al menos una corona mundial en juego y enlazó su 10ª definición categórica consecutiva. El último adversario que llegó a escuchar las tarjetas de los jueces, en noviembre de 2019, fue el filipino Nonito Donaire, quien volvió a intentarlo en junio de 2022 y fue noqueado en solo dos asaltos.
Kim, de 32 años, se convirtió este viernes en el primer surcoreano en coprotagonizar una pelea mundialista desde que Young Gil Bae fue noqueado por el tailandés Wanheng Menayothin el 24 de noviembre de 2015 en un pleito en que estuvo en juego la faja de la división mínimo del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). La última victoria de un púgil nacido en ese país en un duelo por una corona ecuménica fue la que In Jin Chi logró ante el mexicano Rodolfo López el 17 de diciembre de 2016 por el cetro pluma del CMB.