Rodrigo Rey y su familia viven momentos de angustia y preocupación. Es que el colegio José Manuel Estrada de City Bell decidió no renovarle las matrículas a sus dos hijos, especialmente a Benicio, quien está diagnosticado con autismo.
Por ello, el arquero mantiene una disputa judicial con el instituto para que revierta su postura. Este lunes, antes del partido, hubo apoyo total para él. Ambos equipos salieron al campo con auriculares inhibidores de sonido y con remeras con la leyenda “Con los chicos, no. Este partido lo jugamos entre todos”, por iniciativa de la Asociación Civil TEActiva.
Además, en la popular los hinchas colgaron una bandera que decía: “El autismo es parte de este mundo, no es un mundo aparte”. Todo el estadio ovacionó a Rey con un caluroso “Rodriiiigo, Rodriiigo” y el arquero de 33 años, emocionado, se llevó las manos al corazón y agradeció.