Si en la Argentina aparecieron grietas en los últimos años, como en el casi de la política nacional y así en otros sectores, sin dudas uno de los ámbitos que quedó enredado en una circunstancia de divisiones y con ahínco fue el del automovilismo nacional. El máximo organismo de la disciplina en el país, el Automóvil Club Argentino (ACA), parece despertarse después de tantos años de somnolencia frente a la avasallante actitud de la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC).
El ACA tiene el poder máximo del automovilismo en el país, ya que está alineado a la Federación Internacional del Automóvil (FIA), la institución máxima del deporte motor. Sin embargo, en los últimos tiempos, la ACTC, que bajo su órbita tiene al Turismo Carretera como máximo estandarte (quedó con ese poder desde 1979 como consecuencia de otro conflicto), acumuló en los últimos tiempos categorías que se pasaron de una fiscalización a otra.
En contra de lo que establece el Código Deportivo Internacional de la Federación Internacional del Automóvil, la entidad teceísta aumentó su mapa de fiscalización y con ello, rompió el acuerdo tácito que se había logrado en 2001, cuando se produjo un distanciamiento similar entre ambas entidades.
El área del automovilismo por parte del Automóvil Club Argentino es la Comisión Deportiva Automovilística (CDA). Desde allí se gestiona la fiscalización de las competencias de las categorías que están bajo su ala, como el TC2000 o el Top Race, entre otras, y aquellas que son zonales, a través de las regionales que responden a la CDA del ACA.
El 2024 se presenta como un año de muchos movimientos dentro del automovilismo a nivel directivo, porque al repentino crecimiento de la ACTC se le sumó el cambio de mando en el ACA, donde César Carman asumió como nuevo presidente de la casa madre y Eugenio Breard inició su camino al frente de la Comisión Deportiva Automovilística (CDA), sector que tuvo en el control de sus riendas durante más de dos décadas al cuestionado ingeniero Carlos García Remohí.
Tras asumir en mayo, Carman (hijo y nieto de sendos presidentes de la institución que ya cuenta con 120 años de historia) otorgó una entrevista a Carburando, donde se expresó sobre el conflicto que sacude al automovilismo nacional y se expresó sobre la relación que mantiene con la ACTC, que en la actualidad está controlada por Hugo Mazzacane.
“No hay ninguna enemistad desde el ACA para con la ACTC. Entendemos que lo que ellos hacen lo hacen muy bien, y han logrado hacer un gran negocio en el país», afirmó Carman, y agregó: «Yo creo que cuando uno es juez y parte se generan problemas. Cuando el que organiza y tiene que fiscalizar hay un conflicto de intereses».
El presidente del ACA, que en su faceta social administra un club con 300.000 socios, maneja una red de 190 estaciones de servicio en todo el territorio nacional y una flota de 500 unidades para el auxilio mecánico, indicó: “Nosotros tenemos delegado el poder deportivo y fundamentalmente somos los encargados de fiscalizar, es eso, nada más. Entonces, si en este caso la ACTC quiere abarcar otras categorías, en nuestra opinión, eso es incorrecto y por eso las llamamos carreras clandestinas porque no están fiscalizadas por el ente que lo tiene que hacer, que es la CDA”, expresó.
Además, descartó de plano que este conflicto tenga tintes políticos. “También he escuchado algunos medios comentar que la política se ha metido en este conflicto. Yo lo único que te puedo decir es que, desde el ACA, esto no es una cuestión política. Cumplimos 120 años, lo hemos hecho toda la vida, no es algo político”, apuntó.
En los pasillos del edificio de avenida Del Libertador al 1800 se escucha que es inminente una presentación judicial sobre la problemática deportiva con la ACTC. «Lo estamos analizando -afirmó Carman-. Probablemente alguna acción haya, tampoco podemos quedarnos con los brazos cruzados. No soy especialista en términos legales, pero alguna acción que marque esta historia y estas cuestiones que están fuera de un encuadramiento que asegure a los pilotos”.
Por último, el presidente del ACA fue tajante al señalar que la iniciativa para restablecer un vínculo cordial tiene que salir desde el lado de Mazzacane. “No hay diálogo. Mañana me llama Hugo Mazzacane y hablo. Yo no lo voy a llamar porque no corresponde. Los que rompieron el equilibrio fueron ellos”, sentenció para culminar Carman.
¿Qué es la COPAM?, el ente cuestionado tras un accidente fatal
La disputa política que hoy existe entre la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) y la Comisión Deportiva Automovilística (CDA) del Automóvil Club Argentino (ACA) sumó un nuevo capítulo y también un nuevo actor. El flamante protagonista que apareció en este enfrentamiento es la Comisión Provincial de Automovilismo y Motociclismo (COPAM).
Una de las leyes que rige a la COPAM pondrían en jaque a las intenciones de la ACTC de avanzar sobre la fiscalización de nuevas categorías y federaciones. La Ley 12391 establece en su artículo 9 que en la COPAM «solo se autorizarán competencias organizadas y fiscalizadas por entidades con personería jurídica, afiliadas al organismo deportivo, titular del poder de la especialidad».
La COPAM es un ente creado por el Ministerio de Gobierno de la Provincia de Buenos Aires a través del Instituto Bonaerense del Deporte y del que participan un representante de esta última entidad y de las siguientes instituciones: Ministerio de Justicia y Seguridad, Dirección Provincial de Transporte, Administración Provincial de Vialidad, Policía, Automóvil Club Argentino (ACA), Asociación Corredores de Turismo de Carretera (ACTC), Federación Bonaerense de Motociclismo (FEBOM) y la Confederación Argentina de Motociclismo Deportivo (CAMOD).
Dicha comisión está compuesta por 13 integrantes, repartidos con siete representantes del Poder Ejecutivo, un representante del ACA, la ACTC, FEBOM y CAMOD y dos representantes de las Federaciones Regionales de Automovilismo de la Provincia de Buenos Aires.
COPAM, que depende de la Subsecretaría de Deportes de la Provincia de Buenos Aires a cargo de Leandro Lurati, debería enfrentar las responsabilidades correspondientes tras lo que sucedió en el accidente sucedido el 14 de julio último en el autódromo Roberto Mouras, de La Plata, en el que falleció Alfredo Picardi, de 48 años, competidor de la categoría Amigos Fiat 1400
Esa competencia fue autorizada por COPAM. Hay firmas de la CDA (que lo hicieron bajo reserva, ya que cuestiona la integración de la COPAM y la legitimidad de la ACTC), ya que desde el punto de vista del ACA, son parte de la “actividad clandestina”, que advierte Carman.