Fernando Echenique, de pésima tarea en la goleada de River a Barracas Central en el estadio Monumental, quedó en el ojo de la tormenta. No solo por la complicidad con los jugadores del equipo visitante para realizar cualquier tipo de artimaña, sino también por las críticas de Marcelo Gallardo y por algo mucho más curioso: al final del partido cambió la camiseta con Pity Martínez.
Gallardo gesticuló y marcó varias veces la demora que estaban generando los jugadores de Barracas Central, algo que realiza habitualmente, y que no permitía agilizar el juego. Y en la conferencia de prensa criticó duramente al árbitro y al fútbol argentino por estas cuestiones.
“El segundo tiempo terminó a los 45 minutos, ¿por qué? Había que respetar el tiempo de adición y no se respetó. No está bien, no está bien: No hay que hablar mucho porque te tildan de loco, pero no me gusta. A mí me gusta que el fútbol argentino esté en evolución. Ahora no hay descensos… entonces, ¿Cuál es el problema? Porque todos sospechan de todo. Me gustaría que haya reglas más claras”, expresó el laureado entrenador.
Las estadísticas del partido le dan la razón al Muñeco. El partido se detuvo 102 veces. El lapso con más tiempo seguido de juego fue de dos minutos con 17 segundos. El período más perdido en saques de arco fue de 2’16» con River y 5’30» con Barracas. En los tiros libres: 8’10» con el local y 7’36» con el visitante. En los laterales: 3’28» y 4’46», respectivamente. En los corners: 6’03» para el Millo y 1’29’ para el Guapo. Además, Barracas perdió seis minutos con once segundos en situaciones de protestas y lesiones. Y hubo un tiempo neto de juego de 47 minutos con 7 segundos en los 94 minutos y 10 segundos de partido.
Echenique no sólo fue noticia por su actuación durante el partido, sino también por un hecho que se produjo después del mismo. Ni bien terminó el partido y se juntó con los asistentes, le pidió la camiseta a “Pity” Martínez, que había entrado en el segundo tiempo.
Al salir del estadio, un cronista de TyC Sports le preguntó al árbitro si efectivamente se había llevado la camiseta del zurdo del Millonario y por qué se la había pedido. Y Echenique respondió: “Porque lo conozco de Huracán de hace rato, jugábamos a la pelota juntos”. El juez también contó que tiene la camiseta de Martínez de cuando jugaba en el club de Parque Patricios.
Echenique no es el único árbitro de Primera División que le pide, ante los ojos de todos, una camiseta a un futbolista. En marzo pasado, en la Bombonera, el árbitro Pablo Echavarría sorprendió al pedirle la casaca a Edinson Cavani tras la victoria de Boca frente a Racing, por la Copa de la Liga.