Si su eliminación a manos del australiano Alexei Popyrin en la tercera ronda del US Open el viernes fue un campanazo en Nueva York, también resultaron sonoras las palabras tras su derrota del serbio Novak Djokovic, quien aseguró que había exhibido “uno de los peores tenis” en sus más de dos décadas de carrera profesional. Su traspié y el que había sufrido el jueves el español Carlos Alcaraz (fue vencido por el neerlandés Botic van De Zandschulp) abrieron el panorama para varios aspirantes a la corona, entre los que destaca el número uno del mundo, el italiano Jannik Sinner.
“Sin dudas, él jugó mejor y mereció ganar. Honestamente, con la manera en que me sentía y la forma en que jugué desde el principio de este torneo, llegar a la tercera ronda es un éxito. Jugué uno de los peores tenis que he jugado jamás. En cuanto al saque, el peor por lejos”, sentenció Djokovic, tetracampeón de este certamen (lo obtuvo en 2011, 2015, 2018 y 2023), tras su derrota por 6-4, 6-4, 2-6 y 6-4 ante Popyrin, 28° en el ranking de la ATP y ganador del Masters 1000 de Montreal hace menos de tres semanas.
“Si jugás en una superficie rápida como esta sin el saque y sin la capacidad de ganar puntos gratis, con un porcentaje muy bajo de primeros servicios y muchas dobles faltas, no podés ganar. Especialmente contra jugadores que están en forma como él, que estaba sacando muy bien y poniendo mucha presión en mi servicio. Fue un partido terrible para mí”, añadió el balcánico, quien completará una temporada sin un título de Grand Slam por primera vez desde 2017.
Nole, de 37 años, atribuyó parte de su flojo rendimiento a la falta de energía, a la que asoció con el esfuerzo que le había demandado la competencia en los Juegos Olímpicos de París, en los que se quedó con la medalla de oro. “Llegué a Nueva York no sintiéndome fresco mental y físicamente. Me sentía sin fuerzas y eso se notó en la forma en que jugué”, admitió el ganador de 24 títulos de Grand Slam, quien desperdició una chance más de superar a la australiana Margaret Court (también consiguió 24 entre 1960 y 1973) para fijar el récord absoluto en el tenis.
“Como es el Abierto de Estados Unidos, le di una oportunidad y di lo mejor de mí. No tuve problemas físicos, simplemente no tenía nafta y eso se podía ver por la forma en que jugué. Tengo que aceptar que torneos como este suceden”, afirmó resignado el número dos del mundo. Esta fue la primera vez desde Australia 2017 en que no alcanzó los octavos de final de un Grand Slam (aquella vez perdió en la segunda ronda contra el uzbeko Denis Istomin) y la primera desde 2006 en que cayó en la tercera ronda en Nueva York (en esa ocasión lo superó el australiano, Lleyton Hewitt).
La eliminación del serbio arrojó una muestra más del cambio de era que está atravesando el circuito, puesto que este será el primer año desde 2002 en que ninguno de los cuatro trofeos de Grand Slam quede en manos de alguno de los integrantes del Big 3. El español Rafael Nadal, jaqueado por las lesiones, no compitió en Nueva York y no lo hará en lo que resta del año, y el suizo Roger Federer goza de su apacible jubilación.
Sin Djokovic en escena, la racha negra de los campeones vigentes del US Open sumó un nuevo capítulo: nadie logró defender el trono desde que Federer encadenó cinco títulos entre 2004 y 2008 (en 2009 perdió la final ante Juan Martín del Potro). Y este año solo queda en carrera un hombre que alguna vez se coronó en la Gran Manzana: el ruso Daniil Medvedev, quinto en el escalafón mundial, quien lo consiguió en 2021.
Los prematuros traspiés de Djokovic y Alcaraz no fueron los únicos de jugadores que aspiraban a bastante más en este certamen: 18 de los 32 preclasificados capitularon en las primeras tres rondas. De esta forma, el cuadro masculino quedó repleto de alternativas y busca a un aspirante fuerte al título. En la mitad superior todavía continúan en carrera Sinner y Medvedev. En la porción inferior, ya se instalaron en los octavos de final el alemán Alexander Zverev (4°), el ruso Andrey Rublev (6°) y el noruego Casper Ruud (8°).
“El cuadro se está abriendo. Obviamente Sinner es el principal favorito, pero también están (Frances) Tiafoe y (Taylor) Fritz como favoritos estadounidenses. Tenés a tipos que están jugando bien como Zverev, Rublev y (Grigor) Dimitrov en esa parte del cuadro. Cualquiera puede ganar”, analizó Djokovic, quien deberá seguir las instancias decisivas del torneo por televisión.