Exequiel Tejeda y Julián Encina, dos jugadores de la reserva de Godoy Cruz, fueron detenidos este viernes tras haber violado las reglas de conducta que les impuso la fiscalía en el marco de una causa que los investiga por el presunto abuso sexual agravado de una chica de 18 años ocurrido en noviembre del año pasado a la salida de un boliche.
Los futbolistas habían quedado en libertad tras pagar una fianza de un millón y medio de pesos, pero una de las condiciones que debían respetar para sostener esa libertad era mantener un domicilio fijo. Ambos denunciaron que residirían en lugares que luego cambiaron sin avisar a la fiscalía, lo que, advertido por el abogado defensor de la víctima, motivó una denuncia que decantó en la orden de detención de los jugadores.
Tras la orden librada por la Fiscalía de Delitos contra la Integridad Sexual, el viernes por la noche se concretó la detención de Tejeda y Encina: el primero permanecerá en la comisaría 44 hasta tanto se efectivice su paso a la cárcel. Encina, por su parte, estará provisoriamente alojado en la comisaría Tercera de la Ciudad de Mendoza.
La detención implica un nuevo revés en la causa que investiga a los reservistas de Godoy Cruz por “abuso sexual agravado con acceso carnal y por ser dos o más personas”: las pericias realizadas por el Cuerpo Médico Forense encontraron muestras de sus ADN en el cuerpo y la ropa de la joven denunciante.
Además, un médico pudo verificar una lesión en el brazo izquierdo de la joven que podría haber sido realizada durante los presuntos abusos.
Un abuso sexual que recuerda al caso que involucra los jugadores de Vélez
La serie de acontecimientos relatados por la joven recuerda a los abusos denunciados en la última semana por una periodista y que involucran a cuatro jugadores del plantel del Club Atlético Vélez Sarsfield.
Según la denuncia, el 20 de octubre pasado la joven había ido a bailar al boliche Wish junto a una amiga, en donde conocieron a Tejeda y Encina.
Al salir, cerca de las 6 de la mañana, la denunciante les dijo que se tenía que cambiar para ir al local gastronómico en el que trabajaba. Los futbolistas le habrían ofrecido su departamento para que lo hiciera pero, al llegar al mismo, ambos habrían abusado de ella repetidas veces.
Al salir del inmueble de los deportistas, la joven se reunió con su amiga y ambas fueron juntas a denunciar el hecho.