Después de consumar un cese de actividades por falta de pago de sus haberes, el plantel de San Lorenzo retomó los entrenamientos pese al temporal que causó estragos en diferentes puntos de la ciudad y provincia de Buenos Aires. De esta manera, Miguel Ángel Russo logró practicar en la Ciudad Deportiva de cara al trascendental partido del lunes ante Argentinos por los cuartos de final del Torneo Apertura de la Liga Profesional.

El paro de 24 horas obligó el desembolso de 300 mil dólares que corresponden a los premios que el presidente Marcelo Moretti, en la actualidad de licencia con denuncias de corrupción en su contra, había acordado con el grupo por clasificar a los playoffs del torneo local.

Si bien los salarios están atrasados desde febrero, los referentes del grupo priorizaron el cobro de ese monto al entender que peligraba su cumplimiento, ya que la promesa corrió por cuenta de Moretti, que por estos días no tiene garante de su palabra.

El plantel levantó la huelga al asegurarse un dinero que temía no recuperar, según consignó el portal Mundo Azulgrana. Desde la dirigencia explicaron que el dinero proviene de ingresos genuinos del club, aunque no se detalló si se trata de sumas de la cuota social o un adelanto realizado por auspiciantes de la entidad.

Pese a que levantaron la medida y se entrenaron, los interlocutores del plantel con la dirigencia expresaron que esperan, al menos, que ahora se achique la deuda salarial.

Si el Ciclón queda eliminado en La Paternal, los futbolistas no tendrán mayor poder de presión, por lo que no se descarta que los jugadores empleen alguna medida antes del partido del lunes, como negarse a concentrar.

“Hace tres días que estoy sentado acá. Parece una silla eléctrica, pero me la tengo que bancar”, reflexionó en una entrevista a TyC Sports, el presidente en ejercicio, Julio Lopardo.

Si bien el dirigente admitió ser parte de la gestión de Moretti, optó por distanciarse la labor del mandatario licenciado y aunque dijo desconocer el acuerdo que existía para con los premios, reunió el dinero para saldar esa deuda.

“Aunque era parte de este gobierno, no estaba en el día a día, participé muy poco y hay cuestiones que desconozco. Por ejemplo, no sé lo que le prometieron al plantel hace tres meses. Me voy enterando ahora”, asumió en la misma entrevista.

«Los jugadores del plantel profesional queremos manifestar públicamente nuestra profunda PREOCUPACIÓN y MALESTAR ante la delicada situación que estamos atravesando», comunicó en sus redes sociales el vasco Iker Muniain cuando el grupo resolvió parar.

En apenas 22 encuentros, Muniaín se transformó en el referente del plantel y fue él quien comunicó la novedad que encontró en menos de 24 horas una respuesta efectiva..

«Hemos sido pacientes, comprensivos y responsables, cumpliendo cada día con nuestros entrenamientos, partidos y compromisos, priorizando siempre al club, sus colores y su gente. Sin embargo, consideramos que ha llegado el momento de alzar la voz», había indicado el vasco.

Según averiguó Clarín, a fin de año pasado también estuvieron a punto de tomar una drástica decisión, aunque la plata apareció en aquella oportunidad luego de la intervención de Agremiados y de la venta del 50 por ciento de dos juveniles (Agustín Hausch y Santiago Sosa) a Defensa y Justicia.



Fuente Clarin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *