«Tengo un sueño. Quiero jugar en Argentina mi último partido y me encantaría que vinieras», propuso Juan Martín Del Potro. Novak Djokovic ni dudó. «¿Me estás cargando? Obvio que voy. Para tí, en Argentina, por supuesto que sí», le respondió en un claro español. Y los dos se fundieron en un abrazo. Esa breve y divertida interacción sirvió para anunciarle al mundo, a través de las redes sociales, que el serbio será el rival en la exhibición del 1° de diciembre en Parque Roca en la que Delpo le dirá adiós al tenis. En el cierre de un año complicado para él, en el que -salvo su emotiva consagración en los Juegos Olímpicos de París- los resultados no lo acompañaron, Nole retrasará el descanso y viajará a Buenos Aires para compartir ese momento tan especial con el tandilense. Un gesto enorme que deja en evidencia, una vez más, el estrecho vínculo que los une.
Del Potro -que jugó oficialmente su último partido en el Argentina Open de 2022- es un «gigante amable», un jugador muy querido en el vestuario, que tiene buena relación con todos sus colegas. Pero con Djokovic construyó una linda amistad durante tantos años, tantos viajes y tantos torneos compartidos en el circuito durante sus carreras.
«En el circuito es difícil crear ese vínculo de amistad cuando competís. Pero Nole es un amigo, alguien a quien quiero que siempre le vaya bien», reflexionó hace varios años el tandilense.
«Juan Martín es alguien a quien aprecio un montón. Nutre los valores correctos de la vida. Se interesa por su familia, por sus amigos, respeta a todos. Lucha en cada partido de principio a fin», aseguró el serbio en la previa de la final del US Open 2018, uno de los últimos partidos que disputaron.
En aquella ocasión, Nole se impuso en tres sets y estiró su ventaja en el historial entre ambos, que arrancó en 2007 y que, tras el cruce del año siguiente en los cuartos de Roma, quedó en 16 a 4 a favor del ganador de 24 Grand Slams.
Video
El argentino lo anunció en un video en sus redes sociales. La exhibición se dará el 1 de diciembre en Parque Roca.
Luego de ese encuentro en Flushing Meadows, Delpo -que jugaba otra vez la instancia decisiva allí después de la que había ganado en 2009 y tras superar la pesadilla por las lesiones en la muñeca izquierda- se quebró en su banco. Y cuando Djokovic lo vio, se acercó, lo abrazó y le dijo que disfrutara ese momento, que debía estar orgulloso y que era una inspiración para él. Un detalle que al balcánico no tiene con cualquier adversario.
Durante los largos períodos que pasó el argentino alejado de las canchas por esos problemas en las muñecas -la derecha lo forzó a pasar por el quirófano en mayo de 2010 y en la izquierda se sometió a tres operaciones y estuvo 11 meses inactivo entre 2015 y 2016- y por la rodilla derecha, que lo empezó a molestar en 2018 y terminó empujándolo al retiro, siguieron en contacto. Y Delpo contó alguna vez que el serbio fue un sostén grande durante sus difíciles recuperaciones.
«Quiero decirle que lo quiero y lo apoyo mucho. Es uno de los jugadores más desafortunados del circuito en cuanto a lesiones. Ya tiene una carrera increíble, pero con todo su talento es una pena verlo enfrentar tanto. Espero verlo pronto, sé que nadie quiere jugar al tenis tanto como él. Estoy seguro de que está haciendo todo lo posible por volver”, comentó Djokovic en agosto de 2020, poco después de la última cirugía en la rodilla del tandilense.
El serbio, uno de los mejores tenistas de la historia, reconoció que la resiliencia del argentino fue una inspiración para superar una dura lesión en el codo derecho en 2017.
«Volver a ser quien fui es un desafío. No soy el primer jugador en enfrentar este tipo de circunstancias con grandes lesiones. Del Potro me viene a la mente. Es alguien que se enfrentó a cosas aún peores, circunstancias difíciles con dos, tres años de cirugías, volver, jugar no tan bien y luego tener que retirarse de nuevo. Y ahora es de nuevo top en el mundo. Eso es impresionante», afirmó el actual número cuatro de la ATP en ese momento.
Quienes suelen acompañar al tandilense en su día a día suelen contar que las charlas entre ambos por whatsapp son frecuentes. Como también son frecuentes los intercambios en las redes sociales, algunos cargados de complicidad. Vale recordar el que protagonizaron hace unos tres años, en la previa de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
«Honrado de jugar para mi gente y mi país en los Juegos», escribió Nole en las redes sociales. «Te voy a estar mirando. Esta vez tenés una chance, amigo», le contestó Delpo. «Sos el mejor, amigo (esa palabra en español). Espero verte de nuevo en una cancha, incluso si me pateas el trasero en los Olímpicos cada vez que jugamos», replicó divertido el balcánico.
Es que el tandilense le había cortado el sueño olímpico las dos veces que se habían cruzado en ese evento. En Londres 2012, lo dejó sin podio al superarlo en el duelo por el bronce. Y en Río de Janeiro 2016, cuando el serbio llegaba como el gran favorito y el argentino estaba en pleno proceso de recuperación, lo bajó en la primera ronda y le propinó una dolorosa derrota.
Los dos se acordaron de ese cruce en tierras cariocas hace unas semanas, cuando compartieron un entrenamiento en el Arthur Ashe, en la previa del US Open.
«Mi mayor éxito fue vencer a Juan Martín del Potro en la final del US Open en 2018», dijo Djokovic. «Mi mayor éxito fue vencerte en Río», retrucó Del Potro. Y el serbio se apuró en aclarar: «¡Y en Londres! Delpo es mi némesis en los Juegos Olímpicos. Ha sido mi asesino».
Unas semanas antes, Nole se había sacado por fin la espina de la medalla olímpica al colgarse el oro en París 2024 con un triunfo que emocionó a muchos, incluso a Del Potro.
«Cuando lo vi ganar la medalla dorada fue una de las pocas veces que me emocioné mucho y lloré viendo un partido de tenis. Tengo una relación muy cercana a él y sé lo mucho que quería ganarla. Completó el juego. No es que me sentía culpable (risas) pero estoy muy feliz por él», contó en charla con ESPN.
Con casi veinte años de historia compartida y una amistad que superó la rivalidad en cancha, Djokovic era el invitado lógico para el último partido de Delpo. Y el serbio no dudó en aceptar la propuesta y volverá a Argentina, tras aquella fugaz visita junto a Rafael Nadal en 2013, y acompañará al tandilense en su última función con una raqueta. Imperdible.