La victoria de la Selección Argentina por 3-1 contra Costa Rica dejó como máximo ganador a Lautaro Martínez. Debieron pasar 777 minutos y más de un año calendario para que en una noche fría de Los Ángeles el Toro vuelva a encontrarse con el gol vistiendo la camiseta albiceleste: entró a mitad del segundo tiempo y le bastó para marcar el último tanto del encuentro al definir de media vuelta dentro del área. Festejó con bronca, intentando desahogarse. Y desde el banco de suplentes, el grito de gol de Pablo Aimar dejó en evidencia que padecía en carne propia la mala racha.

Con efusividad y pateando al cartel publicitario, como si el contexto fuera el de un partido por los puntos y no un amistoso. De esa manera Lautaro celebró su gol después de 16 partidos, con posterior felicitación de todos sus compañeros.

Caso contrario es el del cuerpo técnico cuando las cámaras mostraron un festejo pasivo de su parte. Parecía que confiaban en que el gol llegaría en algún momento. Excepto Aimar.

Más apartado del resto de sus compañeros, el Payaso abrió sus manos apretando los puños y miró al cielo cuando Lautaro se reencontró con el gol. Con los ojos cerrados, en una pose de cuasi agradecimiento, Aimar vivió la situación como si fuera propia.

Igualmente, no resulta extraño el festejo viniendo de parte de Aimar. Es que parece que se trata de un hombre de gritos pasionales: al de esta madrugada lo suma a lista que se abrió con aquel gol a México en el Mundial, donde se sentó en el banco de suplentes al no poder ocultar la emoción del momento.

El último gol de Lautaro había sido previo al Mundial de Qatar, en un amistoso contra Honduras, allá por septiembre de 2022. En el medio ocurrieron un sinfín de oportunidades no concretadas. Durante la sequía, el Toro siempre intentó mostrarse calmo ante las consultas. Aunque, ahora que llegó el gol, dejó entrever que la situación ya comenzaba a tenerlo a maltraer.

«A pesar de que uno trate de evitar esas cosas, a veces piensa y está dando vueltas siempre. Premio al trabajo y agradecimiento a los compañeros que están siempre cerca», dijo el Toro después del triunfo. Y agregó: «Lo hablé un poco con mi familia, pero también ellos me hacer salir un poco de eso, porque estos temas me hacen estar más nervioso y ansioso por buscar el gol«. En el Inter su realidad venía siendo completamente diferente: goleador de la liga con 23 festejos en 29 partidos.

A pesar de la mala racha de más de un año que le tocó atravesar, los números de Lautaro con la Scaloneta se mantienen firmes: convirtió su gol número 22 con la Selección (todos en el ciclo Scaloni) en 56 partidos y es el segundo máximo artillero desde la llegada del oriundo de Pujato, en 2019.

Más allá del año y medio de sequía, lejos están sus perseguidores de alcanzarlo. Tercero recién aparece Ángel Di María con 10 goles, incluyendo su reciente bombazo de tiro libre. Lionel Messi lidera el ranking con 41 tantos.

Pero eso no es todo. Es que además del impacto a presente que tuvo el gol del capitán del Inter de Milán, también le permitió colarse en un ranking de alto valor histórico: se convirtió en el décimo máximo goleador de la Selección. Igualó a Daniel Passarella y Leopoldo Jacinto Luque.

«Muy feliz de entrar en el top 10 de goleadores de la Selección Argentina. Gracias a todos los que me apoyan. Vamos por más», escribió el surgido de Racing en su cuenta de Instagram.

Ahora irá en la búsqueda de alcanzar a Luis Artime, que cuenta con un registro personal de 24 tantos. Qué mejor contexto que hacerlo que en la Copa América, con energías renovadas.





Fuente Clarin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *