corrida supersónica para el gol y una insólita expulsión

Walter Mazzantti hizo todo en otra velocidad. No solo su golazo que hizo delirar a todo Parque Patricios en este viernes santo de Copa de la Liga Profesional, sino también la insólita expulsión que sufrió, preso del éxtasis que le provocó convertir frente a River en un partido clave para la confianza de un Huracán que había empezado muy mal la temporada y parece resurgir de la mano de Frank Darío Kudelka.

Mazzantti corrió desde mitad de cancha dominando una pelota traviesa que picaba, parecía, sin control, ganándole al uruguayo Fonseca que lo persiguió desesperado pero no lo alcanzó, pese a que había arrancado la carrera con unos metros de ventaja. Cuando el atacante de 27 años quedó cara a cara con Franco Armani, tuvo la rapidez mental para tocar la pelota justo por encima del cuerpo del arquero millonario para convertir el 1-0.

Lo que pasó a partir de ahí solo se explica desde la lógica futbolera. Porque a Mazzantti lo había amonestado el árbitro Leandro Rey Hilfer unos minutos atrás cuando taló a Enzo Díaz en el costado izquierdo del ataque de River y haberse sacado la camiseta en el festejo provocó su expulsión.

Paradójicamente fue la falta previa a la jugada del gol de Huracán, porque Esequiel Barco dejó corto el centro, y Franco Alfonso se tiró de media tijera para evitar que el rechace se fuera al lateral, habilitando a la corrida en modo Forrest Gump de Mazzantti.

Llegó desde Huachipato de Chile el ofensivo que ya le dio otras alegrías a los hinchas de Huracán con sus siete goles en diferentes competencias. Fue el tercero en esta Copa de la Liga Profesional, aunque el primero para que el Globo gane un partido (los anteriores habían sido contra Gimnasia y Talleres).