El Gran Premio de México dejó mucho para analizar. Principalmente de aquellos pilotos que tuvieron un fin de semana para enterrar en el olvido, como Sergio Pérez, quien corrió como si no estuviera arriba de un Red Bull y terminó en el último puesto. Rendimientos como este empiezan a encender las alarmas de la escudería austríaca que ya venía monitoreando al piloto mexicano desde principio de año.
Checo calificó su participación este fin de semana como «la peor» actuación que tuvo en un Gran Premio en la temporada 2024, y dolió aún más que fuera en su tierra y frente a su gente. Lo mismo opinó Christian Horner, el jefe de la escudería de bebidas energéticas: «Checo de nuevo ha tenido un fin de semana horrible y ya saben, nada ha ido bien para él este fin de semana», comentó en la rueda de prensa post carrera.
El sábado en la qualy no logró superar la Q1, lo que lo condenó a salir desde el puesto 18° de la parrilla. Si bien el domingo en la largada logró adelantarse cinco posiciones, recibió una sanción de cinco segundos por haber ubicado mal el auto. A pesar de eso, el piloto mexicano estaba decidido a luchar por puntos, lo que ocasionó un cruce con el RB de Liam Lawson que dejó al Red Bull del mexicano con daños en el sidepod derecho.
Después de una parada en los pits, Pérez cayó al último puesto del que no encontró escapatoria. Incluso en las últimas vueltas, volvió a cambiar sus neumáticos por unos blandos para intentar conseguir el récord de vuelta, aunque fue un esfuerzo en vano.
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«Él sabe que la Fórmula 1 es un negocio basado en los resultados e inevitablemente cuando no estás cumpliendo, el centro de atención está firmemente en ti», resaltó Horner.
Si bien Pérez culpó a Lawson por haberle causado daños en su RB20, exclamando: «Arruinó mi carrera», para la escudería austríaca, es impensado ver a uno de sus pilotos terminar tan bajo en la grilla. Incluso Max Verstappen, quien obtuvo una sanción de 20 segundos, logró terminar en la sexta posición.
México será un punto de inflexión para Pérez, quien tendrá la mirada de todo su equipo en lo que resta del año. «Llega un momento en que hay que tomar decisiones difíciles», declaró Horner, buscando hacer todo lo posible para remontar a la cima del campeonato de constructores, algo imposible de hacer si uno de sus pilotos no logra terminar dentro de los puntos.
«Somos terceros por ahora. Nuestro objetivo es volver a una posición donde podamos ganar, pero será una tarea difícil en las próximas cuatro carreras», concluyó.
Si bien el piloto mexicano se pasó toda la temporada desmintiendo rumores de su salida de Red Bull, sus últimas actuaciones fueron de mal en peor, lo que peligra la vigencia de su contrato con la escudería.
Llegado al caso de que Horner tome esa decisión difícil, quedaría en juego una nueva butaca, por ende, una nueva oportunidad para varios pilotos. Entre ellos, Yuki Tsunoda, Liam Lawson, y Franco Colapinto.
Con Pérez fuera de la ecuación, un asiento disponible en Red Bull significa un posible ascenso de algún piloto de RB. De hecho, el japonés Tsunoda fue reclutado por Horner para testear el RB20 en las pruebas post temporada 2024. Por su parte, Lawson dejó muy en claro que está dispuesto a luchar por el asiento de Checo en Red Bull.
De todas formas, sus métodos suelen ser algo agresivos, perjudicando al resto de los pilotos. Sobre la maniobra que realizó para sobrepasar al mexicano este fin de semana, Checo opinó que fue «totalmente inncecesario».
«Tal vez trae demasiada presión, al grado de traer protagonismo. Si no aprende, si no abre la cabeza seguirá haciendo este tipo de maniobras que quizás le cuesten el contrato el próximo año”, agregó.
Sea quien sea el piloto que termine subiendo a Red Bull, eso significaría un asiento disponible en RB para el año próximo, y hay un piloto que todavía no tiene lugar para 2025: Franco Colapinto.
El argentino es el ejemplo perfecto de cómo demostrar talento jugando por las reglas.Tuvo actuaciones ejemplares en las cinco carreras que disputó hasta el momento, y se ganó la atención de varios peso pesados del paddock, incluído Helmut Marko, el asesor de Red Bull.
De hecho, el austríaco confirmó que mantuvo conversaciones con James Vowles, el jefe de Williams, acerca del futuro de Colapinto. El único obstáculo es el contrato a largo plazo que tiene el argentino con la escudería birtánica, pero si Red Bull puede cortar lazos con Checo Pérez antes de tiempo, lo mismo podría ocurrir con Colapinto.