Carlos Tevez confirmó que no estará este sábado en «la Noche del Rey», el evento que el club organizará para celebrar su 120° aniversario. «Como todo el plantel no estaba invitado no me parecía justo ir yo», dijo el entrenador del Rojo tras el triunfo por 3-0 sobre Laferrere por los 32avos de final de la Copa Argentina.

El director técnico de Independiente ahora vuelve a verse involucrado en polémica. Había estado en el centro de la escena tras su enfrentamiento con el árbitro Pablo Dóvalo, quien lo denunció penalmente, tras las declaraciones de Tevez en la conferencia de prensa posterior al empate por 2-2 ante Barracas Central por la fecha 9 de la Copa de la Liga cuando aseguró que lo habían «robado».

Ahora Tevez gambeteó la responsabilidad de asistir a la fiesta del Rojo en medio de rumores que indican que la relación del entrenador con los dirigentes no atraviesa su mejor momento. Sufre los coletazos de la disputa del Apache con Dóvalo y con Pablo Toviggino, mano derecha de Claudio Tapia, el presidente de la AFA, que había sido muy duro en las redes sociales por la acusación de Tevez.

Carlitos contó en la cancha de Lanús tras la victoria ante Laferrere que no le parecía adecuado asistir a la fiesta porque necesita descansar y porque no estaba invitado todo el plantel. «Es la fiesta de las estrellas de Independiente y yo sé cuál es mi lugar en el club», dijo Tevez.

Pero además, trascendió que a Tevez no le cayeron bien las declaraciones que realizó Ariel Holan en los medios el último jueves. El ex entrenador, campeón de la Copa Sudamericana 2017, afirmó que le gustaría volver a dirigir a Independiente. Holan apareció en la escena pública después de un largo periodo en silencio. Su presencia en la fiesta de este sábado no solo habría alejado a Tevez sino que otras figuras del club también habrían decidido no asistir.

El arbitraje de Mastrángelo y los penales que no le cobraron

«El arbitraje… ya sabemos que la cosa va a ser así hasta el final. Nos tenemos que callar», dijo Tevez. En el Rojo estaban muy preocupado por la labor de los árbitros elegidos para sus partidos de la Copa de la Liga. Cómo un búmeran, desde que el DT se consideró “robado” por algunos fallos de Pablo Dóvalo durante el encuentro ante Barracas Central, la lupa quedó puesta en los jueces.

Ante Laferrere por Copa Argentina, donde no hay VAR, el Rojo padeció la falta de revisión de las imágenes: solo en la primera parte reclamó tres penales que no fueron sancionados. Además, le anularon un gol a Javier Ruiz, por una mal percibida falta previa de Gabriel Ávalos, que invalidó la jugada.

Una piña a Ayrton Costa, después de un inocultable forcejeo que ya era falta; la agarrada o tackle a Alexis Canelo seguida en primer plano por la transmisión en vivo. La última, de las claras, terminó con Alex Luna después de haber cruzado la medialuna.

Hernán Mastrángelo cobró dos, pero en el segundo tiempo. El primero fue el que le permitió a Federico Mancuello ampliar la diferencia y determinó la expulsión de Fernando Ortiz en Laferrere, tras sumar la segunda amarilla. El segundo, con el partido liquidado: era imposible no ver cómo a Ignacio Maestro Puch lo bajaban en el área sobre la izquierda. Johnny Quiñónez selló el 3-0 desde los doce pasos y gritó su primer gol vestido de rojo.





Fuente Clarin

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