Jannik Sinner y Carlos Alcaraz no tuvieron tiempo de descansar después de la intensa final del ATP 500 de Beijing, que el español se llevó en tres sets y casi tres horas y media de tenis. Tras el durísimo duelo del miércoles, este jueves viajaron sin perder el tiempo hacia Shanghai, donde arrancarán como máximos favoritos en el Masters 1000 que se juega en esa ciudad. Y como, a pesar de ser grandes rivales en la cancha tienen una muy buena relación, no tuvieron problema en hacerlo en el mismo avión privado.
Simone Vagnozzi, uno de los integrantes del cuerpo técnico del italiano, inmortalizó el vuelo compartido por el número uno y el dos del mundo en una foto que compartió en su cuenta de Instagram. Y que no tardó en hacerse viral, a tal punto que cuando Carlitos encaró los micrófonos, poco después de desembarcar, fue consultado por la curiosa situación.
«Es raro, pero creo que el tenis es diferente de otros deportes», reconoció el murciano, entre risas. «Porque estamos luchando el uno contra el otro, tres horas de partido muy apretado, él pudo ganar pero al final me llevé yo la victoria. Y dos horas después, estamos en el mismo avión, riéndonos, haciendo bromas, hablando sobre la vida y actuando como si nada hubiese pasado antes».
«Probablemente en otros deportes eso sea imposible. En el tenis tenemos una buena relación fuera de la cancha. Obviamente cuando estamos enfrentándonos queremos ganar, vencer a nuestro oponente, pero después tenemos una buena relación con todos. Por eso podemos compartir un avión después de una final como la de ayer», continuó Alcaraz.
Y aunque aseguró que con Sinner no son «mejores amigos», reconoció que se llevan muy bien afuera de la cancha.
«Nos respetamos muchísimo el uno al otro como jugadores y como personas. Cuando estamos viajando o en torneos, estamos con nuestros equipos, así que no hablamos mucho. Pero cuando podemos, hablamos de cosas fuera del tenis, sobre la vida», contó el español.
La final, que Alcaraz ganó por 6-7 (6-8), 6-4 y 7-6 (7-3) para volver al segundo escalón del ranking, terminó cerca de las 21 de la noche del miércoles. A las cuatro de la mañana del jueves, el italiano y el español ya estaban en Shanghai, donde debutarán en segunda ronda, por lo que tendrán un par de días para aclimatarse a las condiciones del nuevo certamen.
Sinner, número uno del mundo, pondrá primera ante el japonés Taro Daniel, 93° de la clasificación; y Carlitos chocará con el italiano Mattia Bellucci, proveniente de la clasificación.
Igual, apenas tuvieron algunas horas para recuperar el sueño -«Dormí unas seis horas desde la final», confesó Alcaraz-, porque en su primer día en Shanghai ya tuvieron algunos compromisos con sponsors y aparecieron, otra vez juntos, en un evento de Nike, la marca deportiva que los viste a los dos.
Primero pasaron por la casa que el gigante de la ropa deportiva tiene en esa ciudad, donde contestaron algunas preguntas y hasta aprendieron cómo pronunciar sus propios nombres en chino: Sinna, el italiano; Aka, el español.
Luego, relajados y sonrientes, participaron de una clínica y un partido exhibición con un grupo de jugadores juniors de China. Y antes de la «competencia», Sinner motivó a sus compañeros de equipo con una frase que generó las risas de todos los presentes. «Perdí ayer con él, no quiero perder de nuevo, ok? Ok, podemos hacerlo», dijo el número uno, de buen humor pese a que aún estaba fresca la derrota en la final del día previo.