La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, le pidió “a los clubes” que expulse a aquellos socios que hayan participado en la marcha del miércoles impulsada por jubilados y que terminó con violentos incidentes entre manifestantes y las fuerzas de seguridad. Lo hizo en una conferencia de prensa en la que además le endilgó a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) la responsabilidad de orquestar entre las instituciones que la componen un comunicado de repudio a quienes utilizaron camisetas en el ejercicio de su derecho a la protesta.
“Nuestro equipo de la Dirección Nacional de Eventos Deportivos, de fútbol, en los días previos llamaron a las dirigencias de los clubes. Ellos dijeron que no habían tenido nada que ver (con la convocatoria de hinchas a la marcha), bueno queremos que saquen una comunicación oficial de cada club, de cada camiseta que se vio ahí, (que exprese) que el club no tiene nada que ver«, apuntó Bullrich.
La ministra se refiere a la comunicación que el director de esa Dirección, Franco Berlín, habría tenido con los responsables de los clubes que figuraban en las convocatorias virales para concurrir a la marcha de los jubilados. Detrás de Bullrich una pantalla mostraba esos volantes digitales con escudos de diversas instituciones.
“Vamos a pedirle formalmente a todos los clubes cuyas hinchadas participaron (en la marcha) una declaración de repudio y que expulsen a todos los asociados que participaron de la marcha. Una expulsión inmediata”, aclaró la ministra. Al cierre de este artículo, la AFA no había recibido por mesa de entradas ningún pedido de ese tipo.

Fotos: Emmanuel Fernández
La funcionaria de Milei le apuntó principalmente a Chacarita: señaló a Leandro Capriotti como «el máximo organizador» de la movilización del miércoles y dijo que es un «amigo y protegido» del histórico dirigente sindical Luis Barrionuevo. Son apellidos históricos de la política del club, pero ajenos a la diaria del club o el tablón.
¿Puede un Gobierno cursar un pedido de ese tipo a los clubes o intermediarlo con la AFA? De hacerlo encenderían las primeras alarmas en Conmebol y FIFA, las dos federaciones en la que la asociación está contenida. Ambos estatutos son idénticos en cuanto a la intervención de una administración estatal en la coyuntura de las instituciones asociadas.
En principio, el estatuto de cada club establece las circunstancias por las que una asamblea puede expulsar a un asociado. Todos tienen un tribunal de honor u órgano interno que juzga y donde se puede defender. En ninguno está contemplado el carácter de inmediato.

“Para expulsar a un socio hay que violar el estatuto y someterse a un proceso interno. ¿Por qué los clubes deben expulsar a un socio por ir a una marcha? No debe haber causales de expulsión por marchar. Vivimos en democracia y todos somos inocentes hasta que se demuestre lo contrario. El tema es que algunas se olvidan y algunos ponen que ir a una marcha a defender a nuestros viejos está mal”, reflexiona una fuente consultada de AFA.
La certeza sobre la imposibilidad de que un socio pierda su condición por la asistencia a una marcha tiene que ver, justamente con el origen de los clubes: muchísimos fundados antes del siglo pasado con la efervescencia de ideas relacionadas con el anarquismo, socialismo o comunismo. Difícilmente en su fundadores hubiesen opuesto la protesta como causal de expulsión.
Chacarita se fundó un 1° de mayo por un grupo de jóvenes vinculados a las ideas anarquistas y socialistas, con fuerte influencia de los obreros del barrio. Los anarquistas de Nueva Chicago promovían la autogestión y la solidaridad obrera. Atlanta estuvo marcada por su afinidad con el socialismo y el comunismo y durante décadas fue un club vinculado a luchas sindicales y culturales en la ciudad.

Si bien no quedan resabios de aquellos socios pujantes más allá de la pelota, el hincha, cada individuo, resolvió salir a la calle. El club y los colores siguen siendo una identificación y acaso algo del presente activó aquellas ínfulas fundacionales. El pedido de Bullrich no solo está alejado del origen contestatario de las instituciones, sino que atenta con el propio derecho a manifestarse de cada persona, más allá del club al que pueda estar asociado.
“Es decir que los mismos clubes que supuestamente encubren a sus socios, son los que no se cansan de mandar cosas a AFA para que nosotros las mandemos para Bahía Blanca: 12 camiones ya salieron y siguen llegando cosas”, bramó otra fuente jerárquica de AFA consultada.
De momento, ninguna institución replicó en sus cuentas en las redes sociales una proclama en contra de las SAD, cómo sucedió en la última campaña presidencial, un guiño que desde el espacio que comanda Milei consideraron como apoyo a la candidatura de Sergio Massa. Al parecer, en Viamonte 1366 no planean hacer eco del pedido de la ministra Bullrich.
Un club del conurbano cuya camiseta se repitió entre los manifestantes del miércoles, fue consultado por el pedido de Seguridad. «Esto es un club, no es una SAD en la que el patrón despide al empleado porque se lo piden”, cerraron con otro guiño a la otra postura que divide al Gobierno y a buena parte de los clubes de AFA.