Durante la entrada en calor, el ex-Juventus miró fijamente al público con claras chicanas para el público local al realizar el típico gesto de «no se escucha» y pidiendo más ruido, lo cual generó gran revuelo en las redes sociales.
Pero al momento de la verdad, Vidal quedó en deuda. Es que pese a su amplia experiencia internacional, el multifacético futbolista quedó ‘enganchado’ en el tiro libre que derivó en el tanto de Facundo Colidio, a los 16 minutos del primer tiempo y que hizo estallar al estadio Monumental.
Después de un centro flotado rechazado en primera instancia por la defensa visitante, Simón volvió a meter la pelota para Colidio, que aprovechó la ‘siesta’ de Vidal y algunos jugadores más del conjunto dirigido por Jorge Almirón para poner el 1-0.
Más tarde tuvo dos cruces individuales. Inicialmente con Marcos Acuña, con quien se enfrentó varias veces a nivel selecciones, después de bloquear una pelota yendo al piso y dándose unas palmadas en el pecho entre ambos antes de reponer el juego desde el lateral.
Pero el más interesante fue con Armani y no se trató de uno relacionado al gol que había soñado con convertir en el estadio Monumental para transformarse en el mejor de su carrera. Es que el arquero lo dejó en ridículo después de gambetearlo dentro del área con un enganche que se le vio poco en su carrera, al momento en que, desesperado, Vidal quiso bloquear un rechazo.
«Cagón, cagón», se le leyó en los labios a Vidal unos minutos después, cuando captado por las cámaras de televisión se quejaba porque Armani no reponía el juego y perdía tiempo con la pelota en posesión.