Hubo suspenso hasta el final en el carrerón que cerró, bajo la lluvia, la séptima fecha del Turismo Carretera, en el autódromo de Posadas. Otto Fritzler y Agustín Canapino protagonizaron una lucha intensa durante toda la prueba y pelearon por la victoria hasta los últimos metros antes de la meta. Pero el piloto de San Miguel, de 22 años, supo aguantar la presión de su rival y terminó festejando su segunda victoria en la categoría y la primera de Toyota en la temporada.
El bonaerense largó desde la pole, cedió el liderazgo en manos del arrecifeño en el primer relanzamiento de la tarde, lo recuperó en el segundo y después defendió la punta hasta el final. Y ni bien vio la bandera a cuadros, se quebró.
«Manejaste excelente todo el fin de semana», lo felicitaron por radio. «Qué carrera, qué carrera. Gracias», alcanzó a decir, dominado por la emoción y el llanto.
Unos minutos después, más tranquilo pero casi sin voz, reflexionó: «No puedo creer que le gané a Canapino. Arriba del auto no vas mirando con quién estás corriendo porque si no, uno se achica. Y él tiene una calidad bárbara al volante. Pero yo salí a correr como lo hago yo. Al límite y a ganarlo, como me dijo el equipo».
«Fue una carrera intensa, pasó de todo. Y Otto me ganó bien, se merece el triunfo», admitió Canapino, que quedó segundo son su Chevrolet y compartió el podio con su compañero de equipo, Valentín Aguirre, que fue tercero.