Vélez, el líder del campeonato, a seis puntos de los tres escoltas, Huracán, Talleres y Unión, es el equipo que que más goles hizo en el torneo con una particularidad: 24 de los 29 tantos los hicieron solo cuatro jugadores: Braian Romero 9, Claudio Aquino 7, Francisco Pizzini y Thiago Fernández, 4. Ninguno de los otros 27 equipos de la Liga marcó más de 22 goles (Talleres lo sigue con esa cifra). Hay unanimidad, el equipo de Gustavo Quinteros es el mejor del torneo. Ninguno tiene un cuarteto ofensivo como el del Fortín.
En la historia del fútbol argentino hubo líneas ofensivas que dejaron su marca y se ganaron apodos por siempre. Los Profesores de Estudiantes en la década del 30 Miguel Ángel Lauri, Alejandro Scopelli, Miguel Zozaya, Manuel Ferreira y Enrique Guaita), La Máquina de River en los 40 (Juan Carlos Muñoz, José Manuel Moreno, Adolfo Pederna, Angel Labruna y Félix Loustau), El Trío de Oro de San Lorenzo de 1946 (Armando Farro, René Pontoni y Rinaldo Martino) y Los Carasucias de Lima en 1957 (Oreste Osmar Corbatta, Humberto Maschio, Antonio Angelillo, Enrique Sívori y Osvaldo Cruz), por citar algunas.
Claro que hubo otras delanteras fenomenales y son muy recordadas pero no fueron bautizadas, como el Huracán del 73 del Flaco Menotti, con René Houseman, Miguel Brindisi, Roque Avallay, Carlos Babington y Omar Larrosa.
Más cercanos en el tiempo, Los Cuatro Fantásticos de River en 2000 (Juan Pablo Angel, Pablo Aimar, Ariel Ortega y Javier Saviola). Y salvando las diferencias, en España, el Real Madrid tuvo a sus Galácticos (Luís Figo, Zinedine Zidane, David Beckham y Ronaldo)
A esta altura, el cuarto ofensivo de Liniers merece ser recordado con un apelativo similar pero adaptado a los nuevos tiempos. Tal vez el apodo de Los Cuatro Magníficos sea un buen tributo para la actualidad de Aquino,Pizzini, Fernández y Romero.
Por supuesto que el puntero de la Liga, además, está bien armado en todas las líneas, con un arquero como Tomás Marchiori que da seguridad bajo los tres palos y que apareció en los momentos justos. Una defensa que puede sufrir modificaciones por lesiones o suspensiones pero se sostiene con Joaquín García, Emanuel Mammana, Valentín Gómez y Elías Gómez. Uno de los déficit se da en las pelotas paradas pero tiene proyección en los laterales y firmeza en los centrales. Y un doble cinco que es un motorcito con el capitán Agustín Bouzat (ausente ante Estudiantes, reemplazado por Jalil Elías) y el pibe Christian Ordóñez. El equipo está en un gran momento, juega bien en todas las canchas y tiene recambio.
Los números del cuarteto ofensivo, Los Cuatro Magníficos, son superlativos. Aquino, a sus 33 años, es el cerebro del equipo, el que abre el panorama hacia los extremos, el que piensa el pase filtrado para sorprender e insiste siempre aunque erre más de los que acierta. Y tiene una pegada fenomenal. En los 15 partidos, remató 40 veces, 15 al arco y 7 fueron gol, es decir, 57 % de efectividad. Además, dio tres asistencias.
Su buen momento en Liniers despertó el interés de Boca pero el jugador explicó: “Le agradecí el interés a Boca pero, como le dije a Fabián Berlanga, yo estoy muy bien en Vélez. No me quería ir mal del club y con la gente, tomé la decisión de no hacer uso de la cláusula de salida. Si ellos querían venderme iba a ser una decisión del club, pero por el cariño con la gente, yo no iba a irme por la cláusula (1,5 millones de dólares)»..
Braian Romero también tiene 33 años y es el centrodelantero que espera ser alimentando para el gol pero como no es un nueve de área, sabe salir para colaborar en los movimientos y dejar espacios libres para las apariciones de sus compañeros e incluso de Ordoñez desde el medio. Es el goleador del torneo con 9 tantos y marcó en los últimos 5 partidos, algo que un jugador de Vélez no conseguía desde 2005 (Lucas Castromán). Tiene una efectividad de 56 % (9 goles tras 32 remates, 16 al arco. Suma dos asistencias.
Tras la victoria ante Estudiantes, el goleador expresó: “Nosotros estamos tranquilos, sabemos que hemos generado expectativas afuera. El torneo es largo, es una responsabilidad linda”.
Francisco Pizzini tiene 31 años y este año recuperó los niveles que tuvo en Independiente y Defensa y Justicia, donde compartió dos años una letal delantera con Romero. Cuando se enciende por el sector derecho, por momentos es imparable. Lleva cuatro goles, con 29 remates y 10 al arco, pero además tiene 5 asistencias.
En la conferencia de prensa antes del partido con San Lorenzo le preguntaron sobre su efectividad, con 4 goles y 4 asistencias (ahora cinco) y respondió: “Uno trata de aportar desde su lugar, no importa quién haga el gol, quién asista… Lo importante es el grupo, el escudo, que Vélez esté lo más arriba posible. Si me toca a mí mejor, me pone feliz, pero lo más importante es el grupo”.
Thiago Fernández es el más joven, 20 años y es producto de La fáVrica, como se denominan a las inferiores velezanas. Es veloz y atrevido con su gambeta, cuando logra superar a su marcador, los hinchas se levantan porque el gol es inminente. También tiene 4 goles, tras 20 remates y 7 al arco. Es, junto con Pizzini, el que más asistencias cedió: cinco.
Fue Gustavo Quinteros el que lo ubicó por izquierda y ya no dejó la titularidad. Golosina Fernández reconoce ese cambio: “Yo era enganche y pasé a ser extremo. El entrenador vio eso que no tal vez yo no venía y me insistió mucho en que pueda jugar en esa posición”.
Entre los cuatro hicieron el 66 % de los remates de Vélez (121 de 183), el 70 % de los que fueron al arco (48 de 68), el 83 % de los goles (24 de 29) y el 75 % de las asistencias (15 de 20). Más allá de la enorme efectividad, también hay imágenes recientes de goles imposibles de errar, como sucedió ante San Lorenzo la fecha pasada (Ordoñez y Pizzini en el arranque y Mahler Carrizo y Rodrigo Piñero en el final), dos de Thiago Fernández, uno ante Banfield y otro frente a San Lorenzo en Copa Argentina. Pizzini, Romero y Aquino no se quedan atrás.
Hace menos de un año, el equipo estuvo en serio riesgo de descender. Con la llegada de Gustavo Quinteros, la historia cambió después del 0-5 ante River en el Monumental. Fue subcampeón de la Copa de la Liga, perdió con Estudiantes en Santiago del Estero la final por penales y el es líder de la Torneo de la Liga, además del equipo que más puntos sumó en el año, que lo lleva directamente a la Copa LIbertadores 2025. Un presente magnífico con Los Cuatro Magníficos como carta ganadora.