Vuelve la MLS pero no vuelve Messi, lesionado hace 41 días en la final de la Copa América entre Argentina y Colombia. La liga de los Estados Unidos es muy particular. No se detuvo mientras se jugaba el certamen continental en ese país pero sí lo hizo durante un mes para que se dispute la Leagues Cup, con equipos de Estados Unidos, Canadá y México.
Pasaron 41 días del llanto de Leo contra los colombianos, su tobillo derecho inflamado y la renguera levantando el trofeo que lo consagró campeón, transformándolo por fin en el futbolista más ganador en la historia de este deporte, por encima de Dani Alves.
Luego llegó la bota ortopédica, su reconocimiento en cancha del Inter Miami y una recuperación que está transitando la parte final de la cuenta regresiva pero a la que nadie desea apurar. El equipo tiene casi asegurada su plaza en postemporada, agendada para octubre, y el objetivo es que Leo llegue en óptimas condiciones a esa instancia de playoffs a todo o nada.
El año pasado Messi llegó al Inter Miami y enseguida fue campeón de la Leagues Cup pero después no pudo torcer el destino de un equipo que marchaba último en la liga. En 2024, la franquicia dirigida por David Beckham se reforzó con un consagrado como Luis Suárez y el aporte de otros buenos jugadores como el paraguayo Matías Rojas, el ex Argentinos Federico Redondo o el ex River David Martínez, entre otros.
En términos de resultados, el saldo viene siendo desfavorable para los dirigidos por el Tata Martíno: quedaron afuera de la Concachampions, los eliminaron temprano de la Leagues Cup y ahora buscarán que en la MLS la tercera sea la vencida.
La Major League Soccer es tan impredecible como lo son sus partidos, por lo que ser campeón sería un logro consagratorio para la franquicia fundada en 2020, la más popular en Norteamérica y gran parte del mundo desde el arribo del 10. Es un objetivo difícil pero no imposible.
Además de obtener el trofeo, sobrevuela la sensación de que el ganador de la Audi MLS Cup (tal es el nombre oficial del torneo) recibirá un premio extra: la clasificación al Mundial de Clubes 2025, ese que jugarán los 32 mejores equipos del planeta en tierra estadounidense y ya tiene confirmadas las presencias de Boca y River como representantes argentinos.
Por Concacaf ya están adentro Rayados de Monterrey, León y Pachuca, todos de México, y el estadounidense Seattle Sounders, pero el país anfitrión se guarda una plaza que todavía no se definió para quién ni con qué fundamentos estará asignada. Eso sí, la pregunta es lógica: ¿qué darían la FIFA, la MLS y (seamos sinceros) los fanáticos del fútbol por ver a Messi en ese festival que tendrá a Mbappé, Haaland y Neymar Jr., entre otros?
Especulaciones aparte, lnter Miami vuelve al ruedo como líder del Este, para tomarse revancha de quien es su escolta, el siempre peligroso FC Cincinnati del ex Boca, Luciano Acosta, que el 6 de julio pasado lo vapuleó 6-1 (con Leo en la Selección), asestándole la peor goleada de su joven historia.
El panorama no merece demasiada preocupación para los de rosa. Teniendo en cuenta que los siete primeros se meten en playoffs y que octavo y noveno acceden a un repechaje para clasificar, Messi y compañía le llevan 26 puntos al décimo, cuando quedan 30 en disputa.
Es tanta la diferencia que acumuló en estos meses que con ganarle a Cincinnati ya le alcanzará para clasificar. Incluso podría hacerlo empatando o hasta perdiendo si se dan otra serie de resultados.
El objetivo sin embargo está puesto en ser el mejor equipo de la temporada regular, contando las dos conferencias, mérito que lo hará acreedor del Supporter’s Shield, un título honorífico que lo meterá automáticamente a la Concachampions del próximo año.
Messi no estará contra Cincinnati este sábado (a las 20.30 horas, transmite AppleTV+) y difícilmente viaje al norte del territorio americano, siete días más tarde, para visitar a Chicago Fire. Lo más probable es que la vuelta del 10 sea frente a Philadelphia Union, el 14 de septiembre, cuando se cumplan dos meses exactos del título continental con la Selección.
En Miami creen que lo más aconsejable sea que Leo se recupere de la mejor forma posible y retome su mejor ritmo para llegar en óptimas condiciones a los playoffs, sin apuros ni obligaciones. De ahí también su ausencia en la lista de Scaloni para los duelos de la Argentina como local contra Chile (5/9) y ante Colombia en Barranquilla (10/9).
En caso de que no vaya al Chase Stadium de Fort Lauderdale a ver a sus compañeros, Leo podrá ver una catarata de partidos, casi todos a la misma hora y siempre por la plataforma de streaming de la manzanita.
De todos los encuentros hay uno que interesará en Argentina: el New England Revolution visitará a Montreal y en el equipo americano podría darse el estreno del ex Boca, Luca Langoni, que está último en la tabla y necesita cortar una diferencia de cinco puntos para meterse en la pelea.