Julio Vaccari ya lo sabe. No se trata de ninguna sorpresa pero es una confirmación que repercute en el plantel de cara a la inminente reanudación del campeonato de la Liga Profesional. Independiente no hará a tiempo de levantar las inhibiciones esta semana y por eso sus refuerzos no podrán quedar habilitados por el momento. De este modo, Marco Pellegrino y Kevin Lomónaco no estarán ante Instituto, este jueves en Córdoba.

Era algo que estaba dentro de las posibilidades. Si bien la dirigencia del Rojo se mueve para tratar de destrabar las deudas inmediatas que lo tienen inhabilitado para sumar nuevos contratos, hay diversos factores que hacen que los tiempos se estiren y no coincidan con el reinicio de la competencia oficial tras el receso por la Copa América.

Son dos incorporaciones las que se entrenan bajo las órdenes de Vaccari desde la semana pasada en Villa Domínico. Se trata de dos defensores centrales que arribaron a préstamo y sin cargo. Tanto Pellegrino como Lomónaco tuvieron sus primeros minutos de rodaje en el amistoso informal que se disputó el viernes pasado ante Argentinos Juniors en La Paternal. Pero no podrán todavía competir por los puntos hasta tanto no se levanten las inhibiciones.

¿Cuándo sucederá eso? Esa es la gran pregunta que por el momento no tiene una respuesta concreta. Son más de 5 millones de dólares los que debe abonar el club de Avellaneda en total para quedar liberado en esta ventana de pases.

Julio Vaccari sabe que deberá arreglárselas sin los refuerzos en el reinicio del torneo. Foto: Prensa Independiente.Julio Vaccari sabe que deberá arreglárselas sin los refuerzos en el reinicio del torneo. Foto: Prensa Independiente.

Eran cinco en total, pero la más chica (de apenas 2 mil dólares) quedó saldada con Edgar Elizalde ya que se llegó a un acuerdo para rescindir su contrato de común acuerdo. Quedan otras cuatro de mayor valor.

Casi 100 mil dólares debe cancelar al Mazatlán por Sebastián Sosa. A su vez, 460 mil de la moneda estadounidense corresponden al Xolos de Tijuana por Facundo Ferreyra.

A Fernando Gaibor se le debe abonar un total de 2.379.000 dólares por una deuda salarial. A este monto se suma un interés del 5 por ciento anual que está corriendo desde febrero del 2023. Existen conversaciones avanzadas con su representante, José Chamorro, para tratar de llegar a un acuerdo por un plan de pagos, previo pago inicial.

La postura más rígida la tiene el uruguayo Silva, cuya deuda asciende a 2.276.000 dólares, que son el resultado del 1.650.000 que Silva reclamó en un principio correspondientes a su sueldo, 296.000 de intereses que corrían desde 2022, y 330.000 de multa por no haber cumplido con el pago inicial.

La cuestión es que al charrúa ya le incumplieron con varios planes de pagos que aceptó con buena voluntad, el último ya con la gestión actual de Independiente. Por eso ahora busca cobrar todo junto.

En Avellaneda cuentan con algunos ingresos importantes como la venta de Ayton Costa al Royal Antwerp de Bélgica por dos millones de dólares netos (aunque no se cobran todos juntos) y los 3 millones de dólares recaudados por la renovación y venta de abonos.

Sin embargo, al mismo tiempo deben afrontar otros compromisos inmediatos de pagos y a su vez están aguardando las autorizaciones del Banco Central para la compra de moneda extranjera y los diferentes giros de dinero para empezar a cancelarle a cada acreedor.

Lo más probable es que los refuerzos que ya llegaron y aquellos que lleguen (se habla del lateral derecho chileno, Felipe Loyola), deban esperar algunas semanas para poder debutar oficialmente con la camiseta del Diablo. Por eso Vaccari ya prepara la formación para este jueves con lo que tiene a disposición.



Fuente Clarin

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