La tranquilidad de la mañana del jueves se vio sacudida por un rumor que desde algunos medios transformaron en noticia. Y rápidamente viajó a las redes sociales y se convirtió en tendencia. La información indicaba que Enzo Pérez «quiere volver a River y está dispuesto a hablar con quien sea necesario para lograrlo». Sin embargo, desde el entorno del jugador, salieron a desmentirlo rápidamente.
Como siempre ocurre en estos casos tan sensibles, cuando algo se filtra de esa manera, se empieza a hacer conjeturas sobre cuánto de realidad hay, cuánto de imaginación y cuánto también de operación. ¿Entonces, por dónde pasa esta trama de Enzo Pérez?
Hay algo que se sabe: Pérez nunca quiso irse de River. Tomó esa decisión porque estaba enemistado con Martín Demichelis y sentía que era uno u otro en el vestuario. Y como Micho -con el respaldo a pleno de la dirigencia- no se iba a ir, el mendocino creyó que lo mejor era salir del club.
Sin embargo, con el correr de los meses, la angustia por haberse ido del club que ama, en el cual deseaba seguir un tiempo más y terminar de otra manera, empezó a apoderarse de su cuerpo. «Le cuesta soltar», afirmó alguien cercano. Así y todo, en Estudiantes está cómodo, volvió a salir campeón y su relación con Eduardo Domínguez y el plantel es óptima.
El tema es que Enzo sigue en contacto con varios de sus ex compañeros en River. Incluso, cada tanto, se junta a comer asados con Nacho Fernández, Milton Casco y Pity Martínez, entre otros. Y lo que sí existió, según pudo averiguar Clarín, es un pedido de los jugadores Millonarios más afines a él para que revea su postura e intente pegar la vuelta.
Ahora, ¿cómo toman esta cuestión desde el lado de Demichelis? En el entorno del entrenador creen que no hay vuelta atrás. Y aseguran que en su momento, luego de que el vestuario se detonara tras los famosos off de Micho con periodistas, el técnico le pidió disculpas pero que luego no pudieron recomponer el diálogo jamás. Enzo no solo no le dirigía la palabra sino que tampoco lo saludaba.
Esa situación quedó expuesta en la final del Trofeo de Campeones en Santiago del Estero, en el último partido de Enzo con la camiseta de River. Tras salir, el ex capitán del equipo Millonario saludó a todos menos a Demichelis. «No es momento para hablar de todo lo que pasó», dijo, luego, entre lágrimas, en la conferencia de prensa.
Tres meses después volvieron a verse las caras en Córdoba, por la final de la Supercopa Argentina. Enzo, con la camiseta de Estudiantes, antes de que el partido empezara en el Mario Kempes, corrió hacia el banco de suplentes y le tendió la mano a Micho. Fue un saludo frío. Al resto de los integrantes del cuerpo técnico y los jugadores que estaban en el banco les dio un abrazo.
En definitiva, de aquí al cierre del mercado de pases se harán muchas conjeturas al respecto. Lo cierto es que Enzo Pérez nunca quiso irse de River pero se fue. Y quizás en algún momento vuelva. Pero hoy es jugador de Estudiantes. Tiene contrato con el Pincha, club que le abrió las puertas y el corazón tras su salida de Núñez, hasta fin de año. Y el técnico de River sigue siendo Demichelis…