Con el pasaje a París 2024 en el bolsillo, el seleccionado masculino de vóleibol celebró este domingo otro enorme logro. Porque por segunda temporada consecutiva se metió en la Ronda Final de la Liga de Naciones, que se disputará entre el jueves y el domingo en Lodz, Polonia. El equipo dirigido por Marcelo Méndez, que finalizó octavo en la tabla de la primera fase, chocará el viernes por los cuartos de final con Eslovenia, el mejor de la etapa inicial y el que selló la clasificación celeste y blanca a los playoffs al vencer este domingo a Serbia.
Argentina había viajado a Ljubljana, la capital eslovena, para la última semana de competencia de la ronda preliminar con un doble objetivo. Cumplió el primero y más importante, conseguir una plaza olímpica, el jueves, con una victoria en sets corridos ante Turquía y otra mano del dueño de casa, que le ganó poco después a Cuba, uno de los rivales directos de los albicelestes en la carrera hacia los Juegos. Y el sábado, tras derrotar a Bulgaria por 3 a 0 (25-22, 25-17 y 25-20) en su último partido de la fase, quedó a un paso de hacer realidad el segundo: los cuartos de la Liga. Necesitaba que se dieran este domingo ciertos resultados para avanzar. Y los resultados se dieron.
El primero llegó desde Manila, Filipinas, la sede del otro grupo que se jugó esta la semana. Allí, Japón se impuso en tres parciales ante Estados Unidos y dejó bien claro el escenario: los argentinos dependían solo del choque entre eslovenos y serbios. Una victoria de los primeros, lo clasificaba. Un triunfo de los segundos, los dejaba afuera porque metía en playoffs a los balcánicos. Y, aunque con suspenso, el destino volvió a sonreírles a Luciano De Cecco y compañía.
Ante su público, Eslovenia no la tuvo fácil, pero se llevó un triunfo en cinco sets por 25-13, 25-27, 25-14, 22-25 y 15-12 y se quedó con el primer lugar de la tabla general, desplazando a Polonia, número uno del mundo y vigente campeón del certamen, al segundo puesto.
Los argentinos cerraron la primera etapa con 18 puntos, gracias a seis victorias y seis derrotas, apenas una unidad más que Cuba y Serbia. Y, como había hecho ya el año pasado, jugarán la Ronda Final.
Tendrán ahora uno de los desafíos más grandes, porque chocarán con el seleccionado esloveno, el más regular de la primera etapa, que solo perdió uno de los doce partidos que disputó, en la segunda semana de acción, a principios de junio en Fukuoka ante Japón.
El duelo cerrará los cuartos, el viernes a las 20 de Lodz (15 de Argentina). En el primer turno de esa jornada, Italia (3° de la primera etapa) enfrentará a Francia (6°). Y el jueves, Japón (4°) y Canadá (5°) abrirán la acción y luego chocarán Polonia (2°) y Brasil (7°). El sábado serán las semis y el domingo, el duelo por el tercer puesto y la final.
En la pasada edición, el equipo albiceleste terminó quinto en la ronda preliminar con un récord de 9-3 y cayó 3 a 0 (25-17, 25-13 y 25-14) ante Italia (4°) en cuartos.
Más allá de la ilusión por cerrar de la mejor manera la Liga, el seleccionado nacional apunta ya con todo a París, donde disputará por cuarta vez consecutiva unos Juegos, algo que no había ocurrido nunca antes.
Debutó en Los Ángeles 1984 y luego participó en las ediciones de Seúl 1988, Atlanta 1996, Sydney 2000, Atenas 2004, Londres 2012, Río de Janeiro 2016 y Tokio 2020. En la capital francesa irá por la tercera medalla de su historia, después de los bronces que se colgó en la cita surcoreana hace 36 años y en los Juegos japoneses hace tres.
En los Juegos que se pondrán en marcha en poco más de un mes, tres integrantes del equipo harán historia. De Cecco y Facundo Conte se convertirán en los primeros jugadores de vóleibol argentinos en disputar cuatro Juegos. Y Méndez, en el único entrenador en dirigir a un seleccionado de este deporte en dos citas olímpicas.