Con los hinchas de Rosario Central ilusionados con un posible regreso de Ángel Di María al club de sus amores, las calles de la ciudad de Rosario volvieron a expresarse en un tono amenazante contra el Fideo y sus chances de volver al país. «¿Todavía vas a volver?», fue la leyenda que apareció escrita con graffiti, este miércoles por la mañana, sobre un retrato callejero dedicado al campeón del mundo.
La triste imagen se dio el frente del club «El Torito», ubicado Camino de los Granaderos y Baigorria, la institución donde el ex Real Madrid, Juventus y Manchester United dio sus primeros pasos en el fútbol antes de hacerse «Canalla».
La vandalización se habría dado durante la madrugada y los responsables todavía no fueron identificados. Ocurrió tan solo horas después de la derrota de Rosario Central contra Peñarol, lo que le valió la eliminación de la Copa Libertadores.
Las rumores que hablaban de un regreso del Fideo al fútbol argentino resurgieron en las últimas horas, en una misión cautelosa que llevan adelante los dirigentes del Canalla para conseguir la vuelta del ídolo por seis meses. «Hoy mismo me hablé con él. Y no es para vender humo, sino que es real», lo confirmó el martes el Kily González, técnico de Unión, que mantiene una importante relación con Di María y Central.
Pintadas contra Ángel Di María en Rosario. Foto: Captura TV.Pero así como la ilusión crece entre los hinchas rosarinos, situaciones como la de esta mañana la desalientan, algo similar a lo que se vivió hace un par de meses. En realidad, las tratativas para que Di María se ponga la camiseta de Central comenzaron a principios de año, pero en marzo se congelaron por motivos familiares y de seguridad: el pasado 25 de marzo fue amenazado por primera vez en su ciudad natal, una noche antes de jugar un amistoso con la Selección Argentina contra Costa Rica.
En aquella ocasión, los autores de la amenaza dejaron un mensaje escrito y dispararon en la puerta del barrio privado Funes Hills Miraflores, ubicado a 15 kilómetros al oeste de Rosario y donde viven varios familiares del jugador. Le advirtieron que no volviera a la ciudad porque traería consecuencias a sus seres queridos.
A fines de marzo detuvieron al responsable y sospechoso de hacer las amenazas y disparos intimidantes contra la familia de Ángel Di María.La delicada situación llevó a Fideo a estar a punto de bajarle el pulgar a su regreso. Su amor por los colores lo llevaron a retomar las conversaciones cuando le habría sido ofrecido un plan de seguridad de parte de la Asociación del Fútbol Argentino y la gobernación provincial de Santa Fe. El mismo se basaría en ofrecerle a su esposa, Jorgelina Cardozo, y su hija vivir en Miami, mientras el jugador residiría en Buenos Aires duante toda su estadía en Central. Debería viajar 300 kilómetros de ida y vuelta para entrenarse.
Pero cuando el camino parecía que comenzaba a allanarse, la segunda amenaza en un lapso de dos meses vuelve a poner en estado de alerta al ídolo de la Selección Argentina y toda su familia como en peligro sus chances de ponerse la camiseta de Rosario Central.