En noviembre de 2023, Leonel Pernía protagonizó uno de los episodios más preocupantes que se recuerder en la historia del automovilismo nacional. Mientras competía en el Gran Premio Coronación 2023 en el Autódromo de la ciudad de Viedma, en Rio Negro, su Ford Focus recibió dos balazos.
Lo más increíble fue que tanto él como su equipo se dieron cuenta de la situación una vez finalizada la carrera, cuando descubrieron el rastro de los dos disparos en la parte delantera del auto, uno en una de las ópticas y el otro en la parrilla que recubre el radiador. Meses después del incidente, el piloto confiesa que ya no se siente tranquilo mientras corre.
En una entrevista con Unife TV, el tandilense de 48 años ahondó sobre lo que vivió en aquella jornada agridulce, en la que se consagró campeón por segunda vez del Turismo Nacional, y reflexionó sobre lo que siente hoy en relación a su hijo Tiago, quien compite en la misma categoría.
«Nunca se había dado en la historia del automovilismo. Se está resolviendo en la Justicia», aseguró. «Quedaron un poco descolocados todo el mundo del automovilismo, pero se está investigando». Pasó medio año y todavía no se pudo determinar quién fue el autor de los disparos que recibió el auto de Pernía.
«Sorpresa total, porque no me entraba en la cabeza y al día de hoy no me entra en la cabeza que le hayan tirado tiros al auto mientras estaba en una carrera, compitiendo», confesó en su charla con Unife TV. También expresó el alivio que sintió sabiendo que esos tiros podrían haber impactado en él, en un auto que iba a 250 kilómetros por hora y con el viento que había ese día.
Uno creería que frente a semejante acontecimiento se tomarían las medidas necesarias, pero Pernía contó que en la dirigencia del automovilismo en todas las categorías «no cambió nada» y que «no se hicieron las cosas que tendrían que haber hecho».
Despúes de todo lo sucedido, el tandilense admitió: «Cuando voy a correr ahora no me siento tranquilo», y reconoció que se siente raro arriba del auto. «No me siento protegido«, afirmó. El impacto fue tan grande que cuando participó en su primera carrera del año, tenía miedo de que estuviera la persona que disparó en aquel momento.
Leonel Pernía y su hijo Tiago, presente y futuro del automovilismo argentino. Foto: Instagram.De todas formas, el automovilismo sigue y será siendo su pasión, aun más considerando que su hijo Tiago se encuentra compitiendo activamente. Es por eso que aseguró que va «a seguir a muerte con esto» para mejorar la seguridad. «Fue un aviso que si no hacemos nada, puede volver a pasar. Nos vamos a arrepentir toda la vida si pasa a mayores», agregó Leonel.
Mientras recorre el último tramo de su prodigiosa carrera, Pernía reafirmó su amor por la profesión que lo hizo famoso: «Si volviera a nacer, no dudaría en ser piloto de nuevo». Además, comentó que su mayor sueño era ver a su hijo en lo más alto del podio, y no le hizo falta esperar demasiado. Este fin de semana, Tiago Pernía se consagró en el Gran Premio Juan María Traverso después de lograr un doblete en ambas carreras del TC2000 en el Autódromo de San Nicolás.