Elián Larregina aportó este sábado una victoria histórica para el atletismo argentino en el Campeonato Iberoamericano que se celebra en la pista de la Universidad Federal del Mato Grosso, en Cuiabá, Brasil. Triunfó en los 400 metros llanos con 45s27 y batió su marca nacional que había logrado con 45s34 en la pasada temporada.
Larregina terminó delante del portugués Omra Elkhatib (45s46) y del colombiano Anthony Zambrano (46s05), gran estrella de la especialidad que fue subcampeón mundial en Doha 2019, subcampeón olímpico en Tokio 2021 y recordman y campeón sudamericano.
Larregina consiguió el primer título para el atletismo argentino en el Iberoamericano. Pero no se quedó allí. Es que el oriundo de Suipacha hizo historia grande. Es la primera vez en más de medio siglo que un velocista argentino triunfa en un evento internacional de esta clase en los 400 metros.
Habría retroceder muchísimo en el tiempo para encontrar la gesta de Andrés Calonge en el Sudamericano de Quito 1969 para encontrar un triunfo argentino en una de las pruebas más exigentes de la programación de pista.
Nacido hace 24 años, Larregina se había convertido en el primer argentino perforar los 46 segundos. En 2022 triunfó en el Sudamericano para menores de 23 y en 2023, además de protagonizar su debut mundialista en Budapest, escoltó al laureado Zambrano en la final del Sudamericano en San Pablo.
No pudo participar em los Juegos Panamericanos de Santiago 2023. Y todo parecía complicarse aún más cuando sufrió una lesión en marzo, en Paraguay, que le impidió participar en distintas series internacionales en Argentina.
Ahora en Cuaiabá reapareció con todo su esplendor y con la gran ilusión de buscar su clasificación para París 2024 -la marca mínima es 45s-, la ciudad donde hace un siglo el atletismo argentino hizo su debut en los Juegos Olímpicos.