El accidente que este lunes por la mañana protagonizó Tiago Palacios, uno de los baluartes de Estudiantes de La Plata, sacudió los festejos por el título en la Copa de la Liga Profesional. Y, navegando las redes sociales de los diferentes futbolistas del plantel, se intuía lo que confirmaron los estudios de alcoholemia practicados por la Policía minutos después de que el auto del nacionalizado uruguayo se incrustara contra un surtidor de nafta en una estación de servicio de Capital Federal: tenía casi el cuádruple del mínimo permitido para conducir por las calles porteñas.
Palacios, al igual que el resto del plantel y la delegación que se consagró en Santiago del Estero después de los penales, circulaba con 1,84% de alcohol en sangre.
Siempre según las imágenes, se pudo identificar que en pleno vestuario del estadio Madre de Ciudades estaba inundado de latas de cerveza para empezar la celebración. El plantel pincharrata se subió a un avión antes de la medianoche y desembarcó en Buenos Aires, donde continuó el festejo en un boliche.
Todavía los jugadores estaban con la vestimenta que habían disputado el encuentro en Santiago del Estero, camisetas y pantalones, pero eso no frenó seguir celebrando la obtención de la estrella número 16 en la historia del club.
La imagen más comentada de ese momento de la noche fue subida por el propio Palacios, en una historia de Instagram. Allí se lo vio junto al otro uruguayo Mauro Méndez y Eros Mancuso, el autor del gol del 1-1 en la final, que sostenía una jarra importante repleta de fernet con cola. Esa foto fue subida cerca de las 2:00 de este lunes, un par de horas antes de que su camioneta impactara contra un surtidor de una estación de servicio sobre la autopista Illia.