Víctor Antonio Legrotaglie, leyenda del fútbol de Mendoza, murió este sábado a los 86 años. El Víctor, como lo conocían todos, fue el jugador más importante de la historia de la provincia cuyana. Fue figura de Gimnasia y Esgrima, cuyo estadio lleva su nombre. El miércoles 27 de marzo había sido internado en el Hospital El Carmen, de Godoy Cruz, por una neumonía bilateral, luego sufrir una descompensación.
El exquisito futbolista, quien padecía de Alzheimer, estaba internado en un geriátrico de Luján de Cuyo cuando fue trasladado al centro médico a raíz de una insuficiencia respiratoria. Este sábado, Oscar Casares, médico cercano a la familia, le había dicho al diario Los Andes que estaba «muy mal».
De acuerdo a la FIFA, tiene el peculiar récord de ser el argentino con más goles de tiro libre. Anotó 66, uno más que los que tiene Lionel Messi (65) y cuatro por encima de Diego Maradona (62). Tiene además la misma cantidad que Ronaldinho y apenas 4 menos que Pelé y 6 que Juninho Pernambucano, el máximo especialista de la historia.
Había nacido el 29 de mayo de 1937, en Las Heras, y estuvo casado con Olga Angélica Martínez, con quien tuvo tres hijos: Víctor Omar (Cocó), Olga y Carina, y dos nietos, Julián ý Sofía.
Comenzó su carrera en Gimnasia y Esgrima en 1953 con solo 15 años. En 1959 pasó a Chacarita, pero estuvo solo una temporada en el Funebrero. Volvió sin escalas a su hogar y jugó allí hasta el 74 para luego retirarse en 1976 en Américo Tesorieri de La Rioja. En el medio rechazó ofertas para ir al exterior, aunque ocasionalmente defendió las camisetas de Atlético Argentino, Independiente Rivadavia y Juventud Alianza de San Juan.
Ya retirado, fue DT en distintos clubes de Mendoza, incluyendo al Lobo, que actualmente milita en la Primera Nacional.