La novela sobre el futuro de Maximiliano Salas, entre el interés de River y la continuidad de Racing, revivió este lunes una vieja disputa del pasado mercado de pases e incluyó a Juan Sebastián Verón, presidente de Estudiantes de La Plata. Luego del cruce que mantuvieron en el verano pasado por el regreso de Sebastián Driussi desde Estados Unidos -quien finalmente fue al ‘Millonario’-, la ‘Bruja’ apuntó contra la dirigencia del club de Núñez por haberse entrometido en la negociación del delantero correntino con la ‘Academia’, cuando ya había acordado de palabra su renovación.
«Al final, los reyes de los buenos modales y los que dan clases de moralismo la hacen peor. Se hacen los ofendidos y te la ponen jajaja Viva la ‘otra cultura'», escribió Verón en una historia de Instagram en su cuenta personal, acompañada con una imagen de un ‘león’, uno de los apodos del club platense.
¿Qué había pasado? Como cada mercado de pases, no hubo una excepción y los cruces sucedieron entre River y Estudiantes por Driussi, aunque lo más picante tuvo aristas más personales que institucionales entre Jorge Brito y Verón.
Primero fue Brito el que no le escapó a la situación, que complicó y atrasó las tratativas con el delantero para su retorno a River: «Cada uno está en su derecho de hacer lo que quiera con su plata o con la que le prestan…», dijo el dirigente. Y luego amplió, hablando sobre el intento de Estudiantes: «Yo no hago ofertas por jugadores sin tener previamente el consentimiento de que el jugador quiere jugar en River».
Ante las palabras desde la institución de Núñez que involucraban el accionar del empresario estadounidense Foster Gillett en Estudiantes, Verón decidió apuntar contra Brito. «Es una cuestión de inseguridad del presidente de River porque ven un competidor», sostuvo el mandamás del conjunto de La Plata.
«Fue una averiguación, no hicimos ninguna oferta por Driussi. Me resulta raro, o sea es River… Después hablé con su representante y eso me cerró la puerta porque me dijo que en Argentina solo juega en River. Después les vino bien, y al agente mejor, la de tirarnos al medio y subir la cotización», explicó la ‘Bruja’.
El contrato está sobre la mesa con la condiciones que venía pidiendo desde hace un mes. Renovación hasta 2027, duplicación del salario y aumento de la cláusula de rescisión. Apretón de mano. ¿Y la firma? Eso se preguntaban ayer en Racing, cuando desde Estados Unidos empezaron a llegar versiones preocupantes para Gustavo Costas. En el momento que parecía que el conflicto con Maximiliano Salas estaba solucionado, volvió a llamar Marcelo Gallardo. Y el delantero, que se encuentra haciendo la pretemporada con el plantel celeste y blanco en Paraguay, ahora podría cambiar de rumbo. El correntino quiere jugar en River. A tal punto, que pediría la ejecución de su salida, valuada en 8 millones de euros limpios.
“Utilizó a Racing para subirse el precio en River”, le dijo un dirigente a Clarín. Salas ya había hablado dos veces con el Muñeco. Consciente de esta situación, Costas charló con el jugador, se involucró personalmente en la negociación. A fin de cuentas, fue el técnico el que lo llamó para volver a la Argentina. Lo conocía de Palestino, donde quedó libre. El atacante de 27 años, nacido en Curuzú Cuatiá, formó un gran tándem con Adrián Maravilla Martínez y fue decisivo en la conquista de la Sudamericana y la Recopa. Y sigue siendo clave para los planes de la Academia, que tiene por delante los octavos de final de la Libertadores ante Peñarol.
“No me podés fallar”, le dijo Costas a Salas. Y se comunicó con Diego Milito. Hubo varias reuniones de Juan Verón, representante del jugador, con Diego Cifarelli, tesorero del club de Avellaneda. El miércoles se llegó a un acuerdo de palabra. Salas se convertiría en uno de los tres futbolistas mejores pagos de la nómina. Desde Racing, incluso, se encargaron de avisar que el problema estaba resuelto. Sin embargo, el correntino se subió al avión con destino a Ciudad del Este sin estampar la firma. ¿Y ahora?
Gallardo habló de Salas antes del partido de River contra Monterrey. Cuando le preguntaron por el delantero, afirmó desde Los Angeles: “Hay mucha hipocresía. Si vos querés a un jugador, primero tenés que hablar con el jugador para ver si hay una intención de venir. Después de eso, listo, están las cosas de club a club, las partes”.
En Racing están molestos con Salas. Y no ven con buenos ojos que River pague la cláusula de salida por un “pacto de caballeros” que se cerró en la última reunión de Comité Ejecutivo de la AFA. Pero el Muñeco también dijo que hoy no tiene jugadores para presionar como en sus mejores tiempos. El delantero de Racing cuenta con esa característica.
En Avellaneda, en tanto, ya tienen al reemplazante para Salas. Se trata de Duvan Vergara, quien tenía previsto llegar esta madrugada a Buenos Aires, donde se someterá a la revisión médica. El delantero colombiano de 27 años llega proveniente de América de Cali, al que Racing le pagó un millón de dólares y le condonó una deuda de dos millones por Juan Fernando Quintero.