Cuando se alinean los planetas, pasan cosas sorprendentes. Aunque en este caso no se trata de planetas, sino de personas, de astros deportivos venerados por los fanáticos de cada deporte. Este domingo de madrugada, el tenista serbio Novak Djokovic y el basquetbolista Stephen Curry tuvieron su encuentro de GOAT’s. Saludos, respeto mutuo y un intercambio de regalos ‘especiales’ tras un partido de la NBA.

Es que el máximo ganador de títulos Grand Slam (24) le obsequió una de sus raquetas con una dedicatoria especial, de su puño y letra, en el grip. Ante esta situación, Curry se sacó la camiseta que había terminado de utilizar para darle la victoria a Golden State Warriors sobre Los Ángeles Lakers para dársela al serbio, después de firmarla en uno de los números que componen el 30, su icónico dorsal.

Djokovic no fue la única personalidad que estuvo el sábado por la noche en la cancha de los Lakers, porque también se dieron cita, entre otros, Bad Bunny, Ben Affleck junto a su pareja Jennifer Lopez y Kim Kardashian.

Y Curry no los dejó sin show. En su regreso luego de tres partidos ausente, el cuatro veces ganador del anillo de la NBA (2015, 2017, 2018, 2022) le dio la victoria a sus Warriors frente a Lakers por 121-128.

Los locales quedaron condenados al perder a Anthony Davis tras el primer cuarto. Fueron un equipo con Davis en ese inicio de partido y otro muy distinto después, débil en defensa, sin el ala-pívot, que tuvo que abandonar la cancha tras sufrir un golpe el en ojo.

LeBron James firmó 40 puntos, 8 rebotes y 9 asistencias y a punto estuvo de dar la sorpresa al final del partido, pero no fue suficiente.

Para los Warriors volvía no solo Curry (que sufría un esguince), sino también Draymond Green. Curry que no anotó en el primer cuarto, acabó con 31 puntos y Green con un doble-doble de 12 rebotes y 13 asistencias.

Hubo polémica en el cierre. Lebron convirtió un triple casi imposible que ponía el marcador 120-124, pero tras revisar la jugada, los árbitros lo anularon por haber pisado la línea.

Revisiones varias y un problema con el marcador que no pudieron resolver detuvieron el partido más de 15 minutos ante la evidente frustración de los jugadores.

Cuando finalmente se reinició el juego, Curry le robó a James el balón y los Lakers dieron el partido por perdido. El marcador final fue de 121 a 128.

Los dos equipos llegaban al decisivo partido de Los Ángeles tras perder sus últimos encuentros. Los Lakers (36-32 global) contra los Sacramento Kings y los Warriors (35-31) contra los Dallas Mavericks.

Warriors y Lakers ocupan ahora la novena y la décima posición, respectivamente, de la Conferencia Oeste, las últimas plazas con acceso al ‘play-in’ en la postemporada.



Fuente Clarin

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