Dos de tres para los argentinos en el cuadro de singles del Masters 1000 de París. Francisco Cerúndolo y Tomás Etcheverry debutaron con buenas victorias en sets corridos y se metieron en segunda ronda. Mientras que Sebastián Báez se despidió muy rápido ante un lucky loser que ingresó al torneo minutos antes del comienzo del partido.
Cerúndolo, 29° del mundo, derrotó al francés Quentin Halys, 90° y proveniente de la clasificación, por 7-6 (7-5) y 6-3. Y Etcheverry, 40° en el ranking, se impuso ante el chino Zhinzhen Zhang, 47°, por 6-3 y 7-6 (8-6). Báez,26° de la ATP, estaba listo para enfrentar a Alejandro Davidovich Fokina, también surgido de la fase previa, pero el español se bajó del certamen por una lesión poco antes de la hora señalada para el encuentro. Y el serbio Miomir Kecmanovic entró como «perdedor afortunado» y le ganó 6-4, 6-7 (5-7) y 7-5) al bonaerense.
En la cancha central, Cerúndolo se mantuvo parejo frente a su rival durante el primer set, que terminó de cerrar en el tie break demostrando que estaba un paso más adelantado. Siguió con el envión en el segundo parcial, en el que se mostró más firme y con más confianza, lo que le permitió llevarse el partido en una hora y 28 minutos.
Fue la victoria número 99 de su carrera (apenas la 14ª en canchas indoor), por lo que si consigue superar la segunda ronda, llegará al hito de un centenar de triunfos en torneos del circuito mayor, a los 26 años. En la habitual firma a la cámara, el porteño escribió «Vamos River», pensando en la revancha de las semifinales de la Copa Libertadores ante Atlético Mineiro, con el 0-3 a cuestas.
Su próximo rival -este martes alrededor de las 13 de Argentina- será el ruso Andrey Rublev, número siete del mundo y quien quedó libre en la primera ronda, ante quien ganó en dos ocasiones -octavos de Hamburgo 2022 semis de Umag este año- y perdió en una -semis de Bastad 2023-, por lo que los números juegan al favor del argentino.
Un rato más tarde, Etcheverry bajó a Zhang y dio el primer paso sobre la cancha dura bajo techo de París Bercy. El primer parcial lo superó con menores dificultades que el segundo, y logró manejar bien la presión del tie break final para terminar de llevarse el partido.
Su próximo desafío será frente al búlgaro Grigor Dimitrov, octavo de la clasificación y otro que arrancará en la segunda ronda, en el que será el primer encuentro entre ambos.
La mala noticia del día fue la eliminación de Báez, el argentino mejor rankeado de la actualidad, que extendió una racha negativa ante un inesperado rival. Es que el bonaerense estaba a punto de saltar a la cancha cuando se enteró que Davidovich Fokina se retiraba del torneo y su nuevo adversario sería el serbio Kecmanovic.
Tan a último momento fue el cambio, que las placas que anunciaban el partido en la transmisión oficial ya habían aparecido con el nombre del español y el público se sorprendió cuando vio aparecer al serbio en el estadio.
En cancha, Báez dio pelea, pero no pudo aprovechar sus oportunidades y terminó cediendo el triunfo en casi dos horas y media de juego. Tras perder por una cómoda diferencia el parcial inicial, el bonaerense levantó en el segundo, en el que levantó dos match points en contra en el tie break antes de cerrar el set. Y llegó a estar 3-1 arriba en el tercero, aunque no pudo evitar la reacción del serbio.
Fue la sexta derrota al hilo para Báez, que no gana un partido desde el debut en el US Open, cuando derrotó al italiano (argentino de nacimiento) Luciano Darderi. Tras ese festejo, se despidió de Nueva York ante Tallon Griekspoor e hilvanó después caídas en el choque con Canadá por la Copa Davis, Shanghai, Amberes y Basilea. Aunque ante Kecmanovic se lo vio más seguro y más peleador que en esos últimos certámenes.
El serbio espera en segunda ronda por el ganador del duelo entre Mariano Navone, 45° y el único representante albiceleste que aún no debutó en París, y el australiano Alex De Miñaur, noveno favorito, quienes jugarán este martes, no antes de las 11.30 de Argentina.